20 may. 2024

Canciller paraguayo minimiza amenaza de gobernador de Río

Jefe de la diplomacia. El canciller Antonio Rivas indicó que Witzel puede decir lo que quiera.

Jefe de la diplomacia. El canciller Antonio Rivas indicó que Witzel puede decir lo que quiera.

El Gobierno paraguayo minimizó ayer la amenaza del gobernador de Río de Janeiro, Wilson Witzel, quien anunció que denunciará a Paraguay ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), para solicitar el cierre de la frontera entre Paraguay y Brasil, porque considera que nuestro país es responsable del tráfico de armas que llega hasta el Estado brasileño que gobierna, el cual vive violentos episodios desde hace años.

“Queda un poco lejos de la frontera”, señaló el ministro de Relaciones Exteriores, Antonio Rivas Palacios, haciendo alusión a la distancia que existe entre Paraguay y el Estado de Río de Janeiro. “Como gobernador puede opinar lo que quiera. Tendremos en cuenta eso si fuera la opinión de Itamarati”, agregó el canciller paraguayo.

Sobre la consulta de si es factible que dentro de los mecanismos de la ONU exista la posibilidad de sancionar a Paraguay, afirmó que “normalmente no se puede hacer eso”.

El gobernador fluminense aseguró que la gran cantidad de armas que llega a Río de Janeiro es originaria de nuestro país. Witzel incluso amenaza con denunciar a Paraguay ante la ONU por la gran cantidad de armas que llegan al Estado brasileño, supuestamente, desde tierra guaraní.

Es más, el gobernador se reunió con el ministro de Justicia brasileño, Sergio Moro, con quien busca un acuerdo para involucrar a la Policía Civil, Militar y Federal en las operaciones para combatir el tráfico de armas y drogas.

Witzel quiere que el Consejo de Seguridad de la ONU prohíba la venta de armas a Paraguay, porque supuestamente tienen como destino final Río de Janeiro. El gobernador asevera que Paraguay, así como Bolivia y Perú, no hace nada contra el tráfico de drogas y armas para el crimen organizado.

“Estos jefes y gerentes del crimen organizado están en la sociedad y trabajan libremente con los carteles de armas paraguayos, colombianos, bolivianos y peruanos. Y estamos durmiendo en una espléndida cuna. Tengo la intención de traer a la ONU evidencia concreta de que estos países son indulgentes con el crimen organizado que nos golpea. O los países de América del Sur se unen para combatir el crimen organizado, o Brasil tendrá que liderar este proceso con esos países”, expresó Witzel.

Más contenido de esta sección
Demasiados episodios grotescos en una semana como para no dedicarles unas líneas.
Tras las impactantes revelaciones que se obtuvieron con la operación Dakovo, que logró exponer tan explícitamente los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas, sobrevino una situación por de más escandalosa: la implicación de altos militares en actividades criminales. Esta fue sin dudas una dolorosa comprobación del elevado nivel de infiltración del poder mafioso dentro de las instituciones del Estado paraguayo. Además de ser profundamente vergonzoso, esto implica un ataque a la democracia.
El Congreso Nacional rompió récord esta semana con el proyecto de la ley de superintendencia; los senadores tardaron 15 minutos para aprobar; los diputados 11 minutos. En una convulsionada jornada, los diputados también aprobaron ley que suaviza penas para corruptos y los senadores salvaron al cartista Hernán Rivas, acusado de tener un título falso de abogado. Y como les quedó tiempo, también mutilaron la ley de puerta giratoria. Este es el espantoso combo navideño que el Parlamento le ofrece al pueblo paraguayo.
Los impactantes resultados de la operación Dakovo lograron exponer en forma explícita los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas. En nuestro país, logró la detención de más de una decena de personas involucradas en un esquema de tráfico internacional de armas y una nota gravísima, entre los detenidos están un militar de alto rango así como ex funcionarios de la Dimabel. Es muy preocupante la manera en que la mafia y el crimen organizado están socavando nuestra soberanía y nuestra democracia.
No fabricamos armas, pero las comercializamos en cantidad industrial. No producimos cocaína, pero el país es depósito, ruta y puerto de embarque de cantidades industriales que llegan a los principales mercados del mundo.
Eduardo Nakayama abandona el PLRA. Solo y apresuradamente, dicen. Quién sabe. Explica que no ve ninguna posibilidad de que su partido pueda desprenderse de la infiltración cartista. Desde adentro ya no hay nada que hacer, sostiene.