A orillas del majestuoso río Paraná, Bella Vista, Itapúa, es un crisol creativo donde la herencia de los inmigrantes alemanes se encuentra con la raíz guaraní para dar vida a piezas únicas que cuentan quiénes son y de dónde vienen los pobladores de este distrito, ubicado en el corazón de las Colonias Unidas junto a Hohenau y Obligado.
No por nada Bella Vista fue reconocida por la Organización Mundial del Turismo como uno de los mejores pueblos turísticos del mundo. ¿Qué hace tan especial la artesanía de esta localidad?
Según Graciela Peralta, miembro de la Asociación de Artesanos, puede ser esa huella alemana con el trabajo finísimo en madera y metal, con enfoque de calidad y durabilidad y, por otro lado, la raíz guaraní con la cestería de tacuara, tallas conectadas con la naturaleza y la identidad de la región.
La artesana también habla del tejido comunitario como las asociaciones Central de Artesanos y Portal de las Artesanas, que sostienen ferias, economía y tradición. En Bella Vista, los miembros de la Asociación de artesanos reciben permanente capacitación mediante apoyo de la Municipalidad local. “Tenemos de manera constante la capacitación en técnicas, costos, marca y ventas para que el oficio sea sostenible”, dijo.
Desde los cuchillos de Andrés Acuña –vendidos a todo el país– hasta el taller-atracción de Juana Paniagua, se siente el arte vivo de los artesanos. “Más que vender, es identidad, pero una gran fuente de ingresos”, remata. NM