Ayoreo Totobiegosode
En el corazón del Chaco, donde la infancia estuvo marcada por la escasez y las caminatas descalzas hacia la escuela, surge una historia de superación que hoy se convierte en símbolo de orgullo. Tagüide Picanerai es el primer abogado del pueblo Ayoreo Totobiegosode, un logro que representa no solo un triunfo personal, sino también un paso histórico para la inclusión de los pueblos originarios en el ámbito jurídico.
Dos comunidades indígenas de Alto Paraguay se manifestaron este viernes con cierres de ruta en el tramo PY15 de la Bioceánica, con el objetivo de reclamar asistencia a las autoridades, debido a las largas sequías y últimamente a las lluvias que dejaron aislada la zona.
Unas 50 familias de una comunidad Ayoreo Totobiegosode sufren la falta de agua en un lejano poblado del Departamento de Alto Paraguay. La falta de lluvia dejó sus tajamares secos y ahora piden asistencia estatal para acceder a agua con urgencia.
La película paraguaya Eami, dirigida por Paz Encina, participará y representará al país en la categoría Mejor Película Internacional de los Premios Oscar 2023.
El indígena ayoreo Totobiegosode, Taguide Picanerai, reconocido este jueves por el Congreso junto a la directora Paz Encina por la película Eami, cuestionó que los pueblos originarios tengan que pasar hambre y no tengan agua, como también que deban deambular en la ciudad, ante el desamparo estatal.
EAMI, la última película de Paz Encina, fue elegida para competir en el Festival de Rotterdam 2022, que se realizará del 26 de enero al 6 de febrero en forma virtual.
La organización ambiental Earthsight, realizó una investigación periodística por la cual se expone la deforestación de parte del Patrimonio Natural y Cultural Ayoreo Totobiegosode, del Chaco, como parte de la cadena de producción de cuero utilizado para tapizar vehículos de alta gama en Europa.
Los incendios del Norte del país han obligado a desplazarse al pueblo Ayoreo Totobiegosode, la última comunidad indígena en aislamiento, al consumirse parte de los bosques del Cerro Chovoreca, frontera con Bolivia y esenciales para su forma de vida como cazadores recolectores.
De permanecer en el aislamiento voluntario, esta creación llegó incluso a Europa con la réplica de un extranjero. El peculiar asiento terapéutico que sostiene piernas y columna trascendió la frontera.