Junto a varios vecinos realizaron una convocatoria para abordar este flagelo que golpea a Puerto Casado, Alto Paraguay, con todas las autoridades de distintas instituciones, pero la mayoría brilló por su ausencia.
Los integrantes de dicha comisión –en su mayoría madres de familia– tienen hijos o algún miembro de sus familias en situación de adicción. Por lo que, precisan de mecanismos para salvarlos de la drogadicción, ya son adolescentes y jóvenes los que caen en el vicio.
En la reunión señalada solicitaron el acompañamiento de las autoridades policiales, fiscales, judiciales y de otras instituciones para acabar con este flagelo. Además, pidieron un rescate de los adictos para reinsertarlos en la sociedad. Para eso, requieren que las autoridades ayuden a solventar los altos costos de un tratamiento para personas adictas.
Claudio Martínez, presidente de la Junta Municipal, lamentó que los jóvenes caigan en la drogadicción. “En vez de estudiar y tener algún trabajo se están hundiendo en la drogadicción y en consecuencia trae robos, inseguridad y este es un pueblo de 7.000 habitantes y hoy día esa arrasando la droga”, suscribió.
Para el edil, la solución no es enviarles a la cárcel a los jóvenes adictos, sino enviándoles a un centro de rehabilitación.
Los vecinos esperan que se les persiga con todo el peso de la ley a los microtraficantes, quienes además reducen los objetos que los adictos canjean por una dosis de droga.