Según la afectada, el video fue captado el 14 de abril pasado, cuando su padre la defendió de una ex pareja que la acosaba desde hace un tiempo. El hecho ocurrió en Yataity, Departamento de Guairá.
“Fuimos pareja un año y yo vivía con él en Villarrica. En marzo pasado hicimos un viaje a Asunción, donde estoy haciendo un curso de modelaje. Él sintió celos y ya en el camino de regreso me propinó varios golpes. Lo denuncié y en el Juzgado de Paz me dieron una orden de restricción”, explicó la mujer, quien aclaró que esta no era la primera vez que la golpeaba.
Según el relato de la afectada, son varios los episodios en los que el hombre intentó acercarse nuevamente, pese a la orden de restricción, e incluso hasta ahora intenta “arreglar las cosas”.
Ella misma describió lo que ocurrió el día en que fue captado el video: “Esa mañana estaba en una parada de colectivos frente a la Comisaría de Yataity, tenía que ir a Asunción para mi curso, cuando él apareció y quiso secuestrarme. Intentó forzarme a entrar a su vehículo, grité y un policía vino a ayudarme. El oficial esperó a que abordara el colectivo. Cuando llegué a Asunción, él ya estaba frente al lugar donde estudio. Otra vez intentó subirme a su vehículo y una señora me protegió. Pero al salir de nuevo, él seguía ahí. Corrí y pude llamar al 911, lo detuvieron pero por poco tiempo”, contó.
Abordó el colectivo que la llevaría de vuelta a Yataity, pero antes llamó a su padre para que la esperara en la parada. Cuando, horas después, llegó al punto de encuentro, se topó con la escena del video: su padre y el hombre ya estaban peleando.
La denunciante señaló que el video fue malinterpretado, ya que en principio se creyó que el agresor actuó por celos al no saber que ella estaba en compañía de su papá. Indicó que el hombre conocía perfectamente a su padre y a pesar de todo lo agredió.
Según la mujer, el agresor se llama Cristian Manuel Urunaga (33) y es funcionario del Hospital Regional de Villarrica. “Dejé de ir a la facultad, también mi curso en Asunción, hasta mi trabajo para mantener mi integridad física. Vivo encerrada en mi casa y él recorre las calles como si nada”, refirió.
Detalló que denunció formalmente al hombre tras sufrir golpes y maltratos en reiteradas ocasiones. “Le perdoné varias veces porque le creí, pero me di cuenta de que no iba a cambiar y lo denuncié por violencia intrafamiliar. Mi caso está en la Fiscalía, a cargo de fiscala Perla Cáceres de Battaglia, pero no se hace nada. Él tiene varios antecedentes”, dijo.