VILLARRICA
Monseñor Ricardo Valenzuela presidirá su última misa en el templo de la Catedral de Villarrica, el viernes 28, antes de asumir el Obispado de Caacupé, el domingo próximo.
El religioso fue elegido hace poco por el papa Francisco para ocupar el cargo vacante dejado por monseñor Claudio Giménez y llevar su misión pastoral a la capital espiritual del país.
Valenzuela deja una huella profunda en la Diócesis de Villarrica del Espíritu Santo que abarca los departamentos de Guairá y Caazapá. Es por eso que –según manifestó– espera recibir a una multitud de feligreses para la celebración religiosa que iniciará a las 15.00. “Espero la afluencia de la mayor cantidad posible de fieles porque deseo compartir con todos”, expresó.
Anunció que en Caacupé implementará un trabajo pastoral similar al desarrollado en Guairá y Caazapá, donde marcó la diferencia en relación con sus antecesores: realizó visitas pastorales periódicas por los distintos barrios y compañías jurisdiccionales de esa diócesis.
Valenzuela se destacó por su sencillez y humildad, ganándose el cariño de la gente al emprender un trabajo pastoral de acercamiento a los fieles. No se limitó a realizar trabajos de oficina y optó por los recorridos pastorales llegando hasta los más recónditos rincones de esta zona del país.
La comunidad católica de Villarrica lamenta el traslado de su pastor y espera que el próximo designado posea las mismas características de trabajo desplegado por Valenzuela Ríos.
