AFP
BEIRUT - LÍBANO
Un alto el fuego global en Siria entre el régimen y los rebeldes entró en vigor ayer antes del inicio de negociaciones de paz, según el acuerdo logrado bajo patrocinio de Rusia y Turquía, y sin Estados Unidos.
El presidente ruso Vladimir Putin anunció ayer el acuerdo y el lanzamiento de conversaciones de paz internacionales junto a Turquía e Irán.
Turquía y Siria, obviamente, calificaron el acuerdo durante la jornada como una gran oportunidad para la paz, e incluso EEUU, que quedó fuera de la negociación, habló de una “evolución positiva”.
Menos de 10 días después de la victoria total siria en la estratégica Alepo, con apoyo de fuerzas rusas, milicias iraníes e iraquíes, el conflicto entró en las últimas semanas en una nueva fase al impulso de Rusia e Irán, padrinos de Damasco, y Turquía, que apoya a los rebeldes. “Un acontecimiento ocurrió hace algunas horas. No solamente lo esperábamos desde hacía tiempo, sino también hemos trabajado mucho para aproximarnos”, indicó Putin durante un encuentro televisado con sus ministros de Defensa y Relaciones Exteriores.
“Se firmaron tres documentos: el primero es entre el Gobierno sirio y la oposición armada sobre el alto el fuego para el conjunto del territorio de Siria”, señaló, precisando que el segundo versa sobre la puesta en marcha de medidas para controlar el respeto de la tregua. “El tercer documento es una declaración de la voluntad (de las partes en conflicto) de lanzar negociaciones de paz sobre la solución siria”, subrayó el presidente ruso.
Según el ministro de Defensa, Serguei Choigu, grupos que representan a unos 62.000 rebeldes armados firmaron el acuerdo de cese el fuego con el Gobierno de Damasco.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, calificó lo acordado como una oportunidad histórica para poner fin a los seis años de conflicto. “De ninguna manera hay que dejar pasar esta oportunidad. Es una oportunidad histórica”, declaró Erdogan en conferencia de prensa en Ankara.
Para el jefe de la diplomacia siria Walid Mouallem, el acuerdo ofrece una “verdadera oportunidad para llegar a una solución política”.