Abdo Benítez, quien fuera candidato por la disidencia colorada en las internas para presidir la junta de gobierno de la ANR, habló de conformar “un equipo nacional en tres meses”.
Recordó los momentos de su campaña enfrentando a la línea oficialista del coloradismo, recalcando que no necesitó de la bendición del presidente de la República Horacio Cartes para ganarse un espacio importante en la preferencia del electorado.
“Cuando no coincidimos con el presidente de la República, la gente pensaba que necesitaba la bendición de alguien. Nadie nos dijo que esto sería fácil, pero como yo digo, todo lo que vale la pena en esta vida requiere de mucho sacrificio y lo que hemos hecho en tres meses de campaña hoy tiene su fruto”, dijo en su discurso.
“En el partido hay gente con coraje y valentía que puede ser capaz de construir el Paraguay diferente”, aseveró.
“La victoria nuestra va a ser la victoria de todo un pueblo, no solo del pueblo colorado, sino de todo un pueblo paraguayo que quiere su redención”, continuó.
“El triunfo de nuestro proyecto va a significar la reconstrucción moral y ética que necesita la política. Nuestro movimiento representa esa esperanza que tiene el pueblo paraguayo en el coloradismo con valores, no un coloradismo con intereses”, puntualizó.
Según información extraoficial que surgió en carpas coloradas, Marito se encuentra buscando concretar esta vez la “bendición” de Cartes para ser ungido como el candidato del oficialismo en las elecciones generales del año 2018. Según rumores, Abdo busca afanosamente convertirse en el “delfín político” del mandatario.
Mario Abdo Benítez usa el apodo Marito para diferenciarse de su padre don Mario Abdo Benítez, quien fue por varias décadas el incansable secretario privado del dictador Alfredo Stroessner.