La fiscala Carolina Romero, que indaga el episodio aún confuso, solicitó la prisión del denunciante por resultar llamativo –según dijo– su comportamiento tras el violento suceso.
El joven relató que estaba con su amigo Alan Yamil Arévalos Mercado, de 20 años, cuando fueron intimidados por los asaltantes. Comentó Franco que se resistieron, pelearon y tras esa situación Arévalos acabó muerto de un balazo en el pecho.
Luego del ataque, el denunciante aseguró que huyó de la escena y fue al hospital. La fiscala mencionó que Franco no denunció el caso ni avisó a los familiares de la víctima, ni a la suya, de lo sucedido. Esta versión llama la atención de la pesquisa y ahora lo investigan. Franco tiene una mordida en el rostro y con esa misma acción le arrancaron parte de una oreja.
La fiscala pidió que se tome una muestra dentaria del fallecido, para comprobar con la herida que tiene su amigo y descartar o confirmar la implicancia de este en el hecho.
Los delincuentes tampoco llevaron ningún objeto de valor de los afectados. Franco, en ese sentido, manifestó que para evitar que se llevaran su motocicleta, tiró la llave en un pastizal. Luego de ser verificada la escena, encontraron un arma de fuego, que sería de los desconocidos.