Edgar Medina | Alto Paraná
El fiscal Erico Ávalos dispuso la detención y luego imputó por robo agravado y asociación criminal a los hermanos Adrián de Jesús Mancuello Valdez y Arnaldo Mancuello Valdez, por el robo de más de mil millones de guaraníes.
El supuesto cerebro de la banda también posee orden de detención. Se trata de Saturnino Martínez García, quien ya posee antecedentes, según el agente fiscal.
Cinco desconocidos fueron quienes perpetraron el robo. Los marginales se desplazaban en un automóvil de la marca Toyota, que luego del asalto fue lanzado a un arroyo en la localidad de San Miguel del Monday, en el distrito de San Cristóbal.
Los investigadores señalaron que hubo comunicación entre el supuesto jefe de gavilla y los empleados de seguridad. “Vamos a pedir el extracto de llamadas para corroborar la información que tenemos”, dijo el fiscal Ávalos.
Martínez fue quien habría persuadido a los guardias de entregar a sus compañeros de trabajo. El fiscal sostuvo ayer que Adrián de Jesús permitió que uno de los delincuentes entrara con el quepis puesto al local, mientras Arnaldo dejó en la planta baja su arma de fuego cuando subió a almorzar en la planta alta del local, según el agente fiscal.
La sospecha de la complicidad de algunos de los empleados había saltado luego de que agentes de la División de Investigación de Delitos confirmaran que uno de los delincuentes intimidó a la gerente, Elisa Hoeffh, advirtiéndole de que conocía el nombre de sus hijos y dónde estudiaba, para exigirle que abra la caja fuerte de la empresa.