Ringo celebrará su cumpleaños en compañía de su mujer, Bárbara Bach, amigos y familiares en el legendario edificio Capitol Records de Los Ángeles, lugar muy ligado a la historia de los Beatles.
Historia a la que se incorporó Richard Starkey, su verdadero nombre, en 1962 al sustituir como batería a Pete Best en la banda creada dos años antes junto a John Lennon, Paul McCartney y George Harrison, que después se convertiría en una de las más influyentes.
No obstante, Starr, nacido el 7 de julio de 1940 en las afueras de Liverpool (Inglaterra), siempre estuvo a la sombra de Lennon y McCartney y, en menor medida, de Harrison. Aunque antes de fichar por los Beatles, Ringo ya era un músico conocido y admirado en Liverpool por sus trabajos con la banda Rory Storm and the Hurricanes, nunca brilló como sus otros tres compañeros.
Ellos sí reconocieron siempre su importancia en la creación del sonido beatle, según escribe en la revista británica The Spectator, James Woodall, autor del libro The Story of The Beatles’ Last Song (La historia de la última canción de The Beatles).
“Creo que fue un genio. El mundo parece que está empezando ahora a aceptar esa idea”, señaló en su texto Woodwall, recordando que Ringo ingresó en el Salón de la Fama como parte de los Beatles en 1989, y este año lo hizo en reconocimiento de una interesante carrera en solitario.
Además, en el 2011, los lectores de la prestigiosa revista de música Rolling Stone consideraron que Ringo ocupa el quinto puesto en la lista de los mejores bateristas. EFE