EFE
El proyecto tiene como objetivo establecer un marco legislativo que regule el uso de la planta en la investigación médica y científica con un enfoque de uso medicinal.
Los legisladores plantearon en el proyecto que se derogue parcialmente la actual ley de sustancias estupefacientes y que se excluya al cannabis de la lista de drogas peligrosas, así como su resina y los extractos y tinturas de la planta, según informó el Senado en un comunicado.
La idea del proyecto de ley, que todavía tiene que pasar por ambas cámaras para ser tratado y votado, establecería la limitación de esta excepción solo y exclusivamente a los fines de la medicina.
“El objeto es establecer un marco regulatorio para la investigación médica y científica del uso medicinal, terapéutico o paliativo del dolor de la planta de cannabis y sus derivados, garantizando y promoviendo el cuidado integral de la salud”, explicó el comunicado de la Cámara alta.
Además, el proyecto contempla la creación de un programa nacional para el estudio e investigación del uso medicinal de la planta de cannabis, supervisado por el Ministerio de Salud Pública.
Este miércoles también se reunió la Comisión de Legislación del Senado, donde se trató un proyecto de ley concreto para creación de este programa nacional y aconsejaron su aprobación.
Paraguay comenzó a vender a principios de junio las primeras dosis de aceite de cannabis para su uso terapéutico y bajo receta controlada, un mes después de que el Ministerio de Salud Pública autorizara su importación a través de un laboratorio local.
La iniciativa surgió tras el importante número de pedidos para la autorización de esa sustancia para mitigar el dolor, entre ellos los de la Asociación de Padres Cannabis Medicinal Paraguay (Camedpar).
Organizaciones como la Fundación Mamá Cultiva Paraguay también abogaron por la aprobación del cultivo de marihuana en Paraguay con fines medicinales.
Paraguay es el principal productor de marihuana de Suramérica y la compraventa y producción de esta planta es ilegal.