25 may. 2024

50% de firmas controladas incumplen el pago

El viceministro de Trabajo, Cesar Segovia, afirmó que en lo que va del 2017 el Ministerio de Trabajo registró infracciones de diferentes normas laborales por más de G. 14.000 millones a varias empresas e instituciones.

Comentó que un promedio el 50% de las empresas fiscalizadas incumplen en el pago del salario mínimo correspondiente.

“Tenemos un incumplimiento de casi 50% de las empresas que han caído en esta infracción (pago de salario mínimo); hay otras violaciones; por ejemplo: con falta de los exámenes médicos, incumplimiento de la carga horaria, que también son bastantes frecuentes”, dijo.

RUBROS. Entre los rubros que más se exponen a los incumplimientos e informalidad mencionó que son los hoteles, las empresas gastronómicas, el sector de transporte y de servicios de seguridad.

“A la fecha tenemos 22 empresas de seguridad que fueron sancionadas”, puntualizó.

Segovia recordó que en 2015 las multas registradas fueron por G. 757 millones y en 2016 treparon a G. 13.388 millones.

Por otra parte, informó que el Ministerio da la posibilidad a los trabajadores que afrontan esta situación lo denuncien de forma anónima. No obstante, aclaró que solicitan información sobre elementos que faciliten la identidad de la empresa para realizar la fiscalización; sin dejar de resguardar a los trabajadores.

En ese sentido, el ministro Guillermo Sosa, enfatizó que en la página digital del Ministerio de Trabajo existe un sitio para denuncias, de tal manera que las personas afectadas no tienen la necesidad de acercarse a la institución.

Destacó que con esa medida también se precautela la identidad del afectado para evitar represalias u otras situaciones que puedan afectarlo laboralmente.

Más contenido de esta sección
Demasiados episodios grotescos en una semana como para no dedicarles unas líneas.
Tras las impactantes revelaciones que se obtuvieron con la operación Dakovo, que logró exponer tan explícitamente los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas, sobrevino una situación por de más escandalosa: la implicación de altos militares en actividades criminales. Esta fue sin dudas una dolorosa comprobación del elevado nivel de infiltración del poder mafioso dentro de las instituciones del Estado paraguayo. Además de ser profundamente vergonzoso, esto implica un ataque a la democracia.
El Congreso Nacional rompió récord esta semana con el proyecto de la ley de superintendencia; los senadores tardaron 15 minutos para aprobar; los diputados 11 minutos. En una convulsionada jornada, los diputados también aprobaron ley que suaviza penas para corruptos y los senadores salvaron al cartista Hernán Rivas, acusado de tener un título falso de abogado. Y como les quedó tiempo, también mutilaron la ley de puerta giratoria. Este es el espantoso combo navideño que el Parlamento le ofrece al pueblo paraguayo.
Los impactantes resultados de la operación Dakovo lograron exponer en forma explícita los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas. En nuestro país, logró la detención de más de una decena de personas involucradas en un esquema de tráfico internacional de armas y una nota gravísima, entre los detenidos están un militar de alto rango así como ex funcionarios de la Dimabel. Es muy preocupante la manera en que la mafia y el crimen organizado están socavando nuestra soberanía y nuestra democracia.
No fabricamos armas, pero las comercializamos en cantidad industrial. No producimos cocaína, pero el país es depósito, ruta y puerto de embarque de cantidades industriales que llegan a los principales mercados del mundo.
Eduardo Nakayama abandona el PLRA. Solo y apresuradamente, dicen. Quién sabe. Explica que no ve ninguna posibilidad de que su partido pueda desprenderse de la infiltración cartista. Desde adentro ya no hay nada que hacer, sostiene.