Una cámara de seguridad grabó cuando uno de los vehículos utilizados en el atentado contra el empresario Wilson Fernández Gonçalvez, de 59 años, de nacionalidad brasileña, llegó a ingresar directamente al interior del depósito donde el objetivo acababa de llegar.
Allí, los guardias de seguridad reaccionaron contra los sicarios que, al tener resistencia desde el interior del lugar, optaron por abandonar uno de los vehículos al ser rociado a balazos, informó Marciano Candia periodista de Última Hora.
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En ese momento, cayó herido uno de los presuntos sicarios, que luego fue arrastrado por los civiles armados hasta el interior del depósito y entregado a la Policía Nacional. En su poder tenía un AK47 con dos cargadores llenos de cartuchos vivos.
Los demás sicarios huyeron del lugar a pie internándose en una zona boscosa, mientras dos de ellos robaron una motocicleta de un transeúnte para seguir la huida.
Por el trayecto los agentes de la Policía Nacional hallaron, pasamontañas, remeras oscuras y chalecos antibalas con la inscripción de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad).
Hay ocho personas aprehendidas
El Departamento de Investigaciones de Amambay detuvo a un total de ocho personas, entre ellas, al objetivo del atentado Wilson Fernández Gonçalvez.
Los demás fueron identificados como Marcelo Ariel Samudio Benítez, de 27 años, sindicado como uno de los presuntos sicarios; Hugo Reinaldo Ruiz Gómez, de 45 años; Juan Ramón Vega Páez, de 29 años; Benjamín Ayala Sosa, de 42 años; estos últimos son guardias de seguridad de la víctima.
También el empleado veterinario de la víctima, identificado como Diego Marcelo Moreira, de 28 años, Luis Carlos Aldana Agüero, de 33 años y Miguel Rosalino Candado Villalba, ambos son instaladores de cámara.
Los intervinientes se incautaron de dos armas de fuego, una de la marca Glock, calibre 9 milímetros, con un cargador y dos cartuchos y otra de la marca CZ-P10F, calibre 9 milímetros de color negro con nueve cartuchos.
Según el informe policial, siendo las 13:00, la Policía Nacional procedió a la aprehensión de los dos instaladores de cámaras que habían instalado una cámara frente al lugar del hecho perteneciente a la empresa Activa SA, cuyo propietario es Miguel Rosalino Candado Villalba y su auxiliar técnico Luis Carlos Aldada Agüero.
La Policía Nacional no brindó mayores detalles sobre los motivos de las aprehensiones de cada una de las personas.
