La empresa Camping 44 SA fue recientemente allanada en el marco del Operativo Sericeo, por presunto tráfico de armas. En el caso de Camping que inició por el desvío al Brasil de unas 42 armas. Por este operativo, un gestor y una ex gestora de la firma se encuentran detenidos.
Además, en el allanamiento la Digemabel encontró un faltante en sus depósitos de unas 89 mil municiones y tras una reverificación se sumaron 2.000 de un lote sin trazabilidad.
Camping 44 también registró ventas con Santa Rosa de Lima. El propietario de la Casa Santa Rosa fue arrestado durante el Operativo Andina I. Las investigaciones sostienen que no contaba con un perfil económico compatible con la compra de armas y que, tras la adquisición, ninguna de las armas fue registrada como vendida a destinatarios finales. Posteriormente, la casa cerró y el armamento desapareció.
Consultado sobre cómo una persona con ese perfil pudo acceder a armas a través de su empresa, el titular de Camping 44, Diego Kemper, evitó asumir responsabilidad directa y centró su explicación en el procedimiento administrativo exigido por la Dirección General de Material Bélico (Digemabel).
“Puede que venga o puede que el mismo vendedor se vaya a visitarle y con eso pasa el pedido, se hace la factura comercial, se trae acá lo que sería su orden de compra, que está firmada por el dueño y por el gestor, que es el gestor habilitado, y con eso se presenta a la Digemabel lo que sería la solicitud de autorización de comercialización y transporte”, explicó Kemper.
Tras el allanamiento del lunes, se realizó una reverificación que detectó faltantes de unas 23 armas y 89.000 municiones. Las armas fueron respaldadas con documentación mientras que persisitió el faltante de las 89 mil municiones. Además de un excedente de 2.000 municiones. Por todo esto Camping 44 mantiene bloqueado su sistema de venta de armas.