De las 10 aulas con que cuenta la Escuela Básica San Antonio, ocho quedaron totalmente inutilizables y otras dos presentan daños severos que obligaron a los padres de familia a clausurarlas por seguridad.
En total, unos 180 alumnos quedaron sin espacios donde desarrollar clases.
La situación es crítica, ya que incluso los árboles del predio fueron derribados o quedaron sin ramas, imposibilitando que los estudiantes puedan continuar bajo sombra.
Lea más: Más de 170 familias afectadas por fuerte temporal que causó estragos en Concepción
El director de la institución Fredy Franco expresó la consternación de la comunidad educativa y señaló que la tragedia pudo ser aún mayor.
“Gracias a Dios, ese día no hubo clases por la movilización docente; de lo contrario, no sabemos qué habría ocurrido. Estamos golpeando puertas en busca de ayuda; la Municipalidad ya nos está asistiendo, pero esto rebasa su presupuesto”, indicó.
En una reunión de urgencia, docentes y padres resolvieron solicitar al Ministerio de Educación la provisión inmediata de aulas móviles mientras se procede a la reparación o reconstrucción de la escuela.
El intendente municipal, Sindulfo Franco, confirmó la gravedad de la situación.
“Ya estamos asistiendo con lo que está a nuestro alcance, pero definitivamente necesitaremos del apoyo de otras instituciones. Existen cerca de 50 viviendas dañadas y dos escuelas afectadas. Con el presupuesto municipal será imposible cubrir todo”, explicó.
La comunidad aguarda la rápida intervención de las autoridades nacionales para garantizar el derecho a la educación de los niños afectados por este desastre natural.