La Dirección de Catastro había solicitado la rectificación de la Resolución 5311/24 por haber detectado diferencias técnicas en el Informe Pericial del Departamento de Topografía y en el Informe Técnico de la Unidad de Ordenamiento Urbano. El oficialismo insiste en minimizar las fallas técnicas, alegando que los cambios solo eran de forma y no de fondo, e insta a que no se polemice; porque, según afirman, el desarrollo de Asunción está en las Costaneras Norte y Sur. Para mañana está prevista la subasta de las seis hectáreas de la Costanera Norte, las fracciones A1 y A3, de 2 y 4 hectáreas, se pondrán a la venta a G. 28.000 millones por hectárea como precio base.
Recientemente, la Junta Municipal aprobó el Plan Regulador de la Franja Costera, un proyecto técnico que dispone cómo se organizará una zona de 1.200 hectáreas de un territorio que linda con el río Paraguay. Incluso hubo una audiencia pública en la que se expuso el informe de un proyecto encabezado por el arquitecto Javier Corvalán, contratado por la Municipalidad en 2022 para trabajar un proyecto ampliado del anterior Plan Maestro de la Franja Costera. La zona de influencia del Plan Regulador tiene sus límites al norte, en el Corredor Botánico y la avenida Primer Presidente, y al sur, en las calles Presidente Franco, Artigas y el río Paraguay. El plan apunta a generar una ciudad basada en el modelo del Urbanismo Ecosistémico. Las tierras que el intendente Óscar Nenecho Rodríguez quiere vender, se encuentran presuntamente comprometidas con un proyecto apoyado por el Banco Mundial, denominado Ecodistrito. Según el concejal Pablo Callizo, las tierras que serán vendidas serán separadas de las que estaban destinadas al Ecodistrito. “Eso va a significar que ellos van a tener que volver a hacer el proyecto desde cero, sin tener en cuenta esas tierras”, declaró.
Otro aspecto que se está pasando por alto es el hecho de que en el sitio conviven más de setenta familias de damnificados, las cuales todavía no fueron notificadas sobre la subasta o sobre una posible reubicación. Esto no solo genera incertidumbre en los pobladores, sino en los posibles compradores.
Otro concejal denunció que todos estos procedimientos apuntan a intentar blanquear el remate de las tierras. “Para blanquear la mala venta que quiere hacer, en un proceso que fue hecho a escondidas de la ciudadanía”, había opinado el concejal Álvaro Grau, quien viene alertando desde principios de este año respecto a la venta de las tierras de la Costanera Norte. “A las apuradas se quieren malvender las tierras y en este proceso no hay otra intención más que pagar los salarios y las deudas que él mismo generó”, apuntó. Grau resaltó asimismo la falta de socialización del proyecto, resaltando que la ciudadanía no sabe de qué trata el plan. Debemos mencionar que la Municipalidad adeuda un total de G. 2,5 billones en préstamos, salarios y otro, según el último balance general. Al año, la Comuna destina más de G. 500.000 millones solo en salarios, incluidas las distintas clases de bonificaciones y subsidios.
No cabe duda sobre el hecho de que hay escasa información sobre el remate, así como tampoco sobre lo que implica para la ciudad perder una importante porción de su territorio. Asunción necesita espacios verdes públicos seguros; necesita también servicios eficientes, y nada de esto será posible sin autoridades que trabajen comprometidas, con transparencia y honestidad.