El Ministerio de Trabajo había anunciado días atrás el retorno de unos 70.000 empleados suspendidos a sus respectivos puestos, con lo cual destacaron “el éxito de la cuarentena inteligente”.
La titular de la cartera, Carla Bacigalupo, fue blanco de críticas en redes sociales tras haber manifestado que el trabajador “recuperó su nivel de ingreso” y que eso se vio reflejado en el repunte de ventas en diferentes sectores comerciales.
En contrapartida, el presidente del Instituto de Previsión Social (IPS), Andrés Gubetich, dijo este jueves que fueron recibidas otras 50.000 nuevas suspensiones laborales.
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“Si se pone en la balanza, en realidad, son unos 20.000 trabajadores los que retornaron a sus puestos”, expresó al tiempo de detallar que en la primera etapa de suspensiones ingresaron 110.000 empleados al listado.
Al respecto, reiteró que está en análisis el desembolso para un tercer pago y el planteamiento de aumentar la base del beneficio al 75% del salario mínimo, de forma retroactiva.
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“Esto va a permitir llegar a USD 47 millones en el desembolso de los USD 100 millones que recibimos. Nos deja un colchón de USD 53 millones para, eventualmente, un cuarto pago”, explicó.
En el marco de la Ley de Emergencia, el Gobierno, a través del IPS otorgó un subsidio de hasta el 50% del salario mínimo para más de 100.000 trabajadores suspendidos.
