EFE
La muestra se llama “Roma Anni Trenta. La Galleria d’Arte Moderna e le Quadriennali d’Arte 1931 - 1935 - 1939" y se puede ver en La Galería de Arte Moderno de Roma hasta el 30 de octubre.
La Cuatrienal nació con el propósito de “concentrar las manifestaciones más significativas del arte italiano en un gran exposición que pretendía convertirse en la más importante a nivel nacional”.
Las tres primeras ediciones de la Cuatrienal, que se celebraron en 1931, 1935 y 1939, tuvieron lugar en el Palacio de las Exposiciones de Roma y, una vez finalizadas, las obras expuestas pasaron a formar parte de los fondos de la Galería de Arte Moderno de la capital italiana.
Por eso, ahora esta galería romana las reúne en una sola exposición, cuyo objetivo es “profundizar en un periodo de gran efervescencia artística al que el régimen dedicó gran atención usándolo como afirmación de la supremacía italiana”, explicó a Efe una de las comisarías de la muestra, Federica Pirani.
La intermediación de Benito Mussolini en la puesta en marcha de la Cuatrienal “coincidió con la intención del dictador de que la capital asumiese importancia no sólo como centro político y administrativo sino también como cultural y artístico”.
La muestra está integrada por 120 obras que repasan temas emergentes de aquel periodo como la confrontación entre los grandes maestros italianos y las nuevas generaciones, los futuristas, los italianos en París o la escuela romana, entre otros.
Mientras que la primera edición estuvo dedicada a los grandes maestros como Arturo Martini o Felice Casorati, la segunda en el año 1935 se centró en las nuevas generaciones con trabajos de Corrado Cagli, Giuseppe Capogrossi, Emanuele Cavalli o Gino Bonichi Scipione.
Y la tercera edición estuvo marcada fuertemente por el clima de guerra y se caracterizó por la presencia de obras de maestros como Fausto Pirandello, Giorgio Morandi o Mario Broglio.
La galería reserva tres plantas a esta exposición, en la que los asistentes pueden ver cuadros pero también otras manifestaciones artísticas como esculturas o películas de la época, además de documentos históricos, cartas y catálogos de las primeras ediciones de la Cuatrienal romana.
En el ámbito de la escultura, se exponen los trabajos de Arturo Martini con “Il pastore” (1939) o de Marino Marini con “La bagnante” (1934), mientras que a nivel pictórico se pueden ver las obras de maestros consagrados como De Chirico, Casorati, Severini o Scipione, y también de otros “menos conocidos” como el “Tribunale tigrino” de Domenico Belli.
“Lo hacemos así para reconstruir en su conjunto la evolución del patrimonio artístico italiano”, dijo Pirani.
En la Italia de los años treinta, durante el fascismo, se combatía una batalla artística vivaz que enfrentó todos los estilos y todas las tendencias: clasicismo, futurismo, expresionismo o arte abstracto, entre otras.
Esta situación se enriqueció con la irrupción de la comunicación de masas con la radio, el cine y las primeras revistas que tomaron gran cantidad de ideas de la pintura y escultura, y las transmitieron al gran público.
De hecho, en cada planta de la galería hay una sala dedicada a la proyección de películas que trasladan al espectador a la cotidianeidad de la Italia de los años treinta.
Una época que fue un “laboratorio complicado y vital abierto a lo que pasaba en el extranjero y que introdujo Italia en la modernidad”, declaró Pirani.
La muestra testimonia a su vez “la relación existente entre el gobierno fascista y las ediciones de la Cuatrienal de las primeras décadas del pasado siglo, que usaba los fondos recaudados para sostener al régimen”, añadió.
Un periodo rico y complejo de la historia italiana en el que, según la comisaria, las transformaciones urbanísticas y arquitectónicas desempeñaron también un rol educativo.
La Cuatrienal supuso, en palabras de Pirani, un momento fundamental para la historia de la colección de fondos de la Galería de Arte Moderno de Roma, que abrió sus puertas en 1925 en el Palazzo Caffarelli y que en 1931, y durante unos años, se llamó Galería Mussolini.
La muestra se podrá visitar hasta el próximo 30 de octubre, una iniciativa pensada para hacer coincidir el final de esta exposición con el inicio de la decimosexta edición de la Cuatrienal de Roma, que tendrá lugar desde octubre de 2016 hasta enero de 2017.