Reclusos se siguen paseando en la zona de vigilancia de los muros perimetrales de la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, incluso vestidos con los uniformes de los guardiacárceles. Esto demuestra que el control en el penal sigue siendo de la población penitenciaria y no de las autoridades. Inclusive, habrían tomado una garita de guardias.
El guardiacárcel José Espínola confirmó ayer que los internos ingresaron al sector donde había armas de fuego y uniformes de los guardiacárceles, de los cuales se apoderaron.
“Ellos (los reclusos) son dueños ahora de Tacumbú. Ayer entraron en la cuadra de los funcionarios, destruyeron todas las casillas, sacaron los uniformes. Algunos que están uniformados están en el muro. Ellos tienen uniformes nuestros, tenemos videos de cuando ellos mismos se visten”, agregó.
Sobre el punto, resaltó que los reos tienen en su poder lanzas, cuchillos, escopetas, armas cortas y fusiles. “Tenemos la información de que los reos están en las perimetrales uniformados”, agregó.
exigen garantías. Ante estos hechos, los agentes penitenciarios de la cárcel de Tacumbú se negaron ayer a ingresar al recinto por falta de garantías tras el motín realizado por el Clan Rotela.
Solamente 14 guardiacárceles ingresaron a trabajar en el penal, mientras que el resto se rehúsa a cumplir con sus funciones debido a que nadie les garantiza su seguridad.
“Se tomó la decisión con los tres grupos que no van a entrar (al penal) y los que están adentro entran por decisión de cada uno. Ellos quisieron entrar y no les podemos atajar. La mayoría está acá y no vamos a entrar hasta que haya garantías”, manifestó Espínola.
Desde el sindicato de los guardiacárceles informaron que faltaría el 50% de las armas de fuego, que supuestamente los reclusos dijeron que iban a devolverlas.
Al respecto, Espínola resaltó que esta situación debilita la seguridad en la cárcel más grande del país. “Los compañeros ya no quieren entrar porque no es la primera vez que esto sucede, se desbordó y no hay garantías para los compañeros”, remarcó el funcionario.
La crisis en Tacumbú se suma a una serie de pedidos que vienen realizando los guardiacárceles, que aseguran que están trabajando en condiciones precarias.
funciona normal. Por su parte, el director del penal, Luis Esquivel, negó que la cárcel hay sido tomada nuevamente por la población penitenciaria y dijo que está funcionando de manera normal. “La cárcel no se tomó, no hay ninguna situación, ahora me estoy enterando, el penal está funcionando bien, yo estoy viniendo del fondo, no hay nada”, expresó el director.
Afirmó que se encuentran realizando inventarios sobre las armas de fuego hurtadas por los reclusos y una vez que concluyan se comunicará al Ministerio de Justicia.
Al ser consultado por los reclusos que se pasean en los muros perimetrales con los uniformes de los guardiacárceles, Esquivel aseguró que no vio a ningún interno vestido de guardiacárcel.