Wilson Ferreira
CIUDAD DEL ESTE
Padres y docentes de la Escuela 975 San Miguel, ubicada en el kilómetro 12 Acaray, de Ciudad del Este (Alto Paraná), cierran la ruta de forma intermitente –desde el pasado miércoles– como medida de protesta requiriendo al Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) garantías para que los estudiantes de esa institución puedan seguir estudiando este año.
Son cientos de alumnos que corren el riesgo de quedarse sin año lectivo, debido a la falta de rubros que habiliten más secciones en el octavo, noveno grados y en el 1° curso de la Educación Media. “La cantidad de alumnos supera la capacidad de la escuela y muchos quedan fuera del sistema educativo por falta de espacio en las aulas”, explicó el profesor Edgar Almada.
“El año pasado ya nos movilizamos por la falta de rubros para el sétimo grado, y lo conseguimos. Sin embargo, nos prometieron que en agosto se nos darían para el octavo, pero con el cambio de gobierno no se concretó, todo quedó en la nada”, agregó.
Crecimiento. Almada mencionó que la situación se agrava año tras año, ya que la cantidad de alumnos crece con los años y no hay suficientes rubros para habilitar más secciones para albergarlos en el siguiente nivel. A esto se suma la dificultad de que los estudiantes se trasladen a otras instituciones, debido a la distancia y la falta de recursos económicos.
El docente también refirió la necesidad de implementar el almuerzo escolar en la institución, ya que la mayoría de las familias de la zona son de escasos recursos.
Julio Rivas, director de la escuela, expuso que la institución cuenta con la infraestructura necesaria para dividir los grados, pero no con los recursos económicos para contratar más recursos humanos para cubrir la demanda.
“Desde el preescolar hasta el sétimo grado tenemos dos secciones, pero a partir del octavo nos vemos obligados a dejar afuera a muchos estudiantes”, lamentó.
Rivas hizo un llamado a las autoridades del MEC y a la comunidad en general para buscar una solución a este problema que afecta a la educación de los niños y niñas de la zona. “Es necesario habilitar más secciones en los grados superiores, y para ello se necesitan más rubros”, insistió.
La Escuela San Miguel, fundada hace 58 años, cuenta actualmente con 750 alumnos y 14 docentes. La comunidad educativa se mantiene firme en su lucha por la educación de sus hijos y espera una respuesta favorable por parte de las autoridades.
El problema de la falta de rubros en la Escuela San Miguel es solo una muestra de la realidad que viven muchas instituciones educativas.
La demanda de educación crece, mientras que los recursos no acompañan el ritmo.