En una madrugada marcada por las bajas temperaturas, agentes de la Comisaría 12ª de Hohenau, Itapúa, protagonizaron un acto de humanidad al rescatar a un niño indígena que dormía a la intemperie sobre una vereda, en pleno centro de la ciudad.
El menor, en evidente situación de vulnerabilidad, se encontraba expuesto al intenso frío y presentaba signos de hipotermia. Gracias a la intervención policial, fue trasladado de inmediato a la sede policial, donde recibió abrigo y cuidados básicos para estabilizar su estado de salud.
Posteriormente, los agentes dieron aviso a la Consejería Municipal por los Derechos del Niño, Niña y Adolescente (Codeni), para dar inicio a los procedimientos legales correspondientes y garantizar el resguardo adecuado del niño.
“Este caso vuelve a poner en evidencia una realidad dolorosa, que es la persistente situación de calle en la que viven muchos niños indígenas en diversas regiones del país, especialmente en las Colonias Unidas. Se trata de un problema estructural que requiere atención urgente por parte del Estado y la implementación de políticas públicas inclusivas, efectivas y sostenibles”, dijo uno de los policías intervinientes que prefirió el anonimato.
Mientras tanto, gestos como el de los uniformados de Hohenau nos recuerdan que, aunque las soluciones de fondo aún están pendientes, la empatía y el compromiso humano pueden marcar una gran diferencia.