Son 85 los pacientes atendidos entre el Puesto de Salud local y el Centro de Salud de San Alberto.
Cáceres señaló que la intención de la familia es determinar qué fue lo que pasó porque recibieron muchas versiones sobre la posibilidad de contaminación, incluso de las bebidas que se sirvieron en la noche de su boda, el 30 de diciembre último.
Cáceres y su esposa, Arminda Martínez, habían ofrecido un agasajo por su casamiento a sus familiares y amigos, para lo cual contrataron un servicio de buffet de la zona. Sin embargo, unas cuatro horas después de la cena, ya en la madrugada del domingo último, tanto sus familiares e invitados comenzaron a sentirse mal y a tener vómitos y diarreas.
“Fue algo muy grave, una situación muy incómoda que no deseamos ni a nuestro contrario; algo muy grave fue lo que pasó. Para nosotros iba a ser un día inolvidable y nos paramos al día siguiente con esta escena. Toda mi familia intoxicada”, sostuvo ante los medios locales al salir del Ministerio Público.
El recién casado afirmó que todos los indicios apuntan a la comida que se sirvió en la noche de su boda estaba contaminada, atendiendo a resultados de estudios realizados a sus familiares, que fueron atendidos en los diferentes centros asistenciales, públicos y privados.
El servicio estuvo a cargo de una emprendedora local, Alzeni Martins de Michels, conforme con los datos, quien también va a ser llamada a prestar declaración.
Cáceres relató que unas horas después de la cena su esposa comenzó a sentirse mal y cuando averiguó entre sus familiares, también le reportaron que ya estaban sintiendo malestar. Al final, la falta de médico de guardia en el Puesto de Salud de Minga Porã obligó a las personas afectadas a buscar atención en el Centro de Salud de San Alberto y otros centros asistenciales de Hernandarias y Ciudad del Este.
Acorde a los datos, en el Centro de Salud de San Alberto fueron atendidos 50 pacientes, mientras que en el local sanitario de Minga Porã 38 pacientes, de los cuales más de 20 tuvieron que ser internados.
Salmonella. Javier Brítez, director del Centro de Salud de San Alberto, afirmó que unas cinco horas después de la cena, los comensales comenzaron a sentir indigestión, seguido de vómitos y diarreas. En el momento solo el centro asistencial a su cargo tenía médico de guardia las 24 horas y los pacientes se agolparon en el local.
Brítez afirmó que se trataría de la presencia de salmonella en lo que sería la ensalada de papas, que los vecinos y amigos de la pareja se sirvieron en la cena. Los que no comieron dicha ensalada fueron los que se salvaron de la intoxicación, conforme con la versión del médico. Dijo que el nosocomio fue rebasado por la cantidad de pacientes que llegó con los cuadros de malestar.