El jefe comunal Óscar Miranda Cáceres expresó su preocupación sobre los hechos acontecidos en los últimos días y que guardan relación con el sistema de salud.
En ese sentido, mencionó que la situación actual golpea de manera inmisericorde a los que sufren la falta de medicamentos, algo que debió preverse con meses de anticipación.
“No puede ser que estemos pasando por este momento de escasez de medicamentos básicos, ni siquiera hablamos de las vacunas que ya todo el mundo está en proceso de vacunación, hablamos de medicamentos básicos”, reprochó Miranda.
Lea más: Mazzoleni responde al Senado: “No voy a renunciar, que quede claro”
A su vez, señaló que en Guairá están a la deriva, sin respuestas, sin herramientas básicas, sin liderazgo y que la gente muere por falta de remedios, añadiendo que los familiares tienen que vender todo lo poco que tienen para solventar un gasto de G. 3 a 4 millones por día.
Asimismo, manifestó que el pueblo hizo su parte acatando las medidas y muchos de ellos fueron los que tuvieron que cerrar sus negocios debido al golpe que provocaron las medidas sanitarias, que al final considera que fue en vano.
Por otra parte, lamentó la pérdida de sus padres y añadió que es un dolor que no le desea ni a su peor enemigo. “En un abrir y cerrar de ojos ya no estaban y estoy seguro que si el sistema de salud estaba en mejores condiciones mis padres, así como muchísimas otras personas, no iban a morir”, indicó.
Le puede interesar: Ante hartazgo ciudadano, Gobierno ahora promete compra simplificada de medicamentos
También exteriorizó que está viviendo en carne propia el dolor que provoca vivir bajo el yugo de la ineptitud y la falta de liderazgo de un Gobierno que perdió el rumbo hace mucho tiempo.
Entre otras cosas, contó que mantuvo la esperanza de que iba a mejorar la situación, alegando que conoce las dificultades de enfrentarse a roscas mafiosas y de lo complicado que es hacer frente a esos grupos de poder.
El jefe comunal afirmó que incluso se enfrentó a viejos amigos por apoyar y defender la presidencia de Mario Abdo, creyendo que su liderazgo iba a liberar del yugo histórico del atraso y la corrupción que sufren los paraguayos que quieren ser honestos, pero que eso nunca ocurrió.
“Hoy con el dolor en el alma le expreso mi profunda decepción sobre el manejo de los destinos de la nación Paraguaya. Somos un barco navegando en una tormenta pero sin capitán y con una tripulación sin rumbo ni certezas”, remarcó Miranda.
Pidió en memoria de los grandes héroes que supieron levantar al Paraguay de sus cenizas que vuelvan a iluminar al soberano y sufrido pueblo paraguayo para que pronto vuelva a ser un país con seriedad, equitativo, solidario y libre de roscas mafiosas que tanto daño ya hicieron.
Finalmente, dijo a los compatriotas que para que hacer un cambio en el país y que ese día llegue pronto, la opción es sacudirse; “Jajetyvyro”.