La agente fiscal Liz Cowan denunció en la Comisaría 7ª Metropolitana que vio a tres personas en dicha dirección, que estaban rezagadas, una de ellas sacó un revólver y disparó dos tiros contra su vehículo, los cuales impactaron en la puerta delantera, lado derecho.
“Llamo al 911 y 20 minutos después me atienden, me identifico como agente fiscal, les cuento lo que pasó, que era una corrida donde estaban con armas”, dijo a un medio.
La agente refirió no tener amenazas en su contra, además se rehúsa a creer que haya sido un atentado.
“Así fueron los hechos, los jóvenes estaban de short y remera, tenían pinta de..., perdón que lo diga, marginales, pero estaban armados”, apuntó.
El comisario Ramón Escobar mencionó, que tras recibir la denuncia de la fiscala fue convocado al personal técnico de Criminalística para analizar a qué tipo de proyectil corresponde el impacto que tiene el rodado de la víctima.
Se trata de un vehículo de la marca Chevrolet, modelo Prisma, de color blanco.
El jefe policial refirió que a simple vista, el rodado presenta un golpe pequeño, el cual no cuenta con orificio de entrada ni de salida, propio de un proyectil de arma de fuego, “sino más bien un impacto, un golpe, similar a una abolladura”.
Continuó señalando que desde este momento deberán comparar, mediante las cámaras de circuito cerrado de la zona, qué fue lo que sucedió en el lugar.
Escobar puntualizó que no pueden descartar nada de lo que tienen hasta ahora a la vista. Y respecto al grupo de personas que se encontraban en la esquina señalada por la fiscala, dijo que analizarán el actuar de los mismos mediante las cámaras.