El novedoso sistema funciona en colaboración con el nuevo portal de informes en línea de eSafety. Este sistema se aplica de manera experimental en Australia.
En Australia se ha dado una epidemia de pornografía vengativa. Esto consiste en la difusión de imágenes sexuales sin consentimiento de la persona afectada.
La compañía explicó que, si un usuario sospecha que es el objetivo de la pornografía de venganza, alerta a la comisión eSafety. A continuación, puede enviarse la imagen o las imágenes a sí mismo a través de Messenger para que Facebook pueda identificarlas y bloquearlas.
El plan piloto le costó unos USD 4,8 millones a la compañía y es uno de los esfuerzos por combatir los delitos a través de esta plataforma.
La oficina del Comisionado notifica a Facebook que las imágenes son enviadas. Luego, Facebook revisa y “codifica” la imagen, lo que crea una huella digital numérica que se almacena y se usa para evitar que alguien cargue la imagen en Facebook, Messenger o Instagram, informó la cadena CNN.