Esto se dio en cumplimiento de la Ley 6389/19 “Que establece el régimen de promoción para la elaboración sostenible y utilización obligatoria del biocombustible apto para la utilización en motores diésel”.
Según reiteraron desde el MIC, elevar el porcentaje de mezcla conlleva importantes ventajas que van desde la arista económica hasta la ambiental, generando una importante cadena de valor a nivel local. Además, evita la capacidad ociosa de la industria, permite la permanencia de divisas, genera una importante cadena de valor en el agro, beneficiando a pequeños y medianos productores, servicios de flete, además del beneficio ambiental, y facilita el cumplimiento de acuerdos internacionales como el Acuerdo de París, para combatir el cambio climático e intensificar acciones necesarias para un futuro con bajas emisiones de carbono.
El titular del MIC, Javier Giménez, aseguró que la industria local de biocombustibles cuenta con la capacidad de doblar su producción.
“Podemos llegar a tener una producción de biodiésel más barata y limpia”, aseguró el funcionario.