La audiencia preliminar se realizó el 29 de marzo del año pasado, donde el juez Yoan Paul López admitió la acusación de la fiscala Natalia Silva contra la acusada Laura Sena, por la muerte del niño, el 20 de agosto del 2019, en el Sanatorio Migone.
Esto fue recurrido por el abogado Ricardo Preda, que representaba a Sena, ante el Tribunal de Apelación Penal. Ahora, los camaristas Bibiana Benítez, Delio Vera y José Agustín Fernández confirmaron que debe ir a juzgamiento público.
La defensa había apelado el rechazo de la nulidad de la acusación fiscal y también del incidente de sobreseimiento definitivo que habían planteado en la audiencia preliminar.
Así, los camaristas declararon admisible estudiar el pedido de nulidad de acusación, no así el pedido de sobreseimiento definitivo. Sin embargo, rechazaron el recurso.
Según la acusación, el 20 agosto del 2019, a eso de las 08:00, Macarena Talavera, madre de Renato Rojas, le llevó al sanatorio Migone para su atención. Ahí ingresó a la sala de observación del servicio de urgencias y quedó a cargo de la doctora Laura Sena.
La Fiscalía dice que, pese a tener información de que se trataba de un paciente cardiópata que le fue informado por la madre, a más del cuadro con que ingresó, “la misma había omitido realizar una serie de acciones que eran esperadas para el caso específico de paciente”.
A raíz de todas estas circunstancias, el niño falleció a las 13:05, de un paro cardiorrespiratorio, pese a las maniobras de reanimación que se le practicó.
En la preliminar, el juez Yoan Paul López elevó la causa a juicio oral por el presunto delito de homicidio culposo, por lo que ahora se deberá sortear un Tribunal de Sentencia que juzgará a la acusada.
En esta causa también habían sido procesados los médicos María de Fátima Bastos, José Manuel Ovando y Óscar Feliciano Cabrera por el hecho punible de omisión de auxilio. Los tres se encontraban en el box en la Sala de Urgencias cuando ocurrieron los hechos.