La cita arranca en el Puerto Antiguo de Concepción, que tiene una rica historia, testigo de la opulencia, valentía y entrega de los soldados que defendieron la patria. Ahí se encuentran los coloridos botes, cuyos dueños fueron formados y adiestrados para recibir y pasear a los visitantes en las aguas del lecho fluvial.
Con la entrega de chalecos identificatorios y salvavidas a los miembros de la Asociación de Boteros de Chaco’i se inició oficialmente esta semana el proyecto turístico Río Mágico que encara la Secretaría de Turismo de la Gobernación del primer departamento del país, con apoyo de la Municipalidad y empresas privadas.
Pintoresco. La primera etapa del proyecto se inició con la pintura de las canoas con tonalidades llamativas y prosiguió con la capacitación a los dueños de las embarcaciones, la cual estuvo a cargo del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Concepción y la Secretaria de Turismo Gubernamental.
Mónica Mareco, secretaria de Turismo, indicó que la segunda etapa se realizará próximamente con el trabajo de un artista plástico en las canoas, de modo tal a que cada uno tenga un diseño o figura identificatoria de la ciudad.
“Es una tradición concepcionera el uso de las canoas, muchos no conocen la belleza que ofrece el río y a través de este proyecto pretendemos que los visitantes tengan una opción válida en contacto con la naturaleza”, comentó.
Fátima Peralta, presidenta de la Asociación de Boteros, agradeció el apoyo de las instituciones involucradas en este proyecto. Refirió que, por primera vez, involucran a los canoeros en una iniciativa turística de esta índole que termina siendo productiva para ellos y sus familias. “Nos sentimos contentos porque nos tuvieron en cuenta en este proyecto que nos va a beneficiar en nuestro trabajo”, destacó.
El costo de cada viaje varía de acuerdo a la distancia, pero los paseos se ofrecen desde G. 8.000.
Las coloridas embarcaciones están ancladas en el Puerto Antiguo de Concepción, donde la gente llega y los utiliza para un paseo por el río o simplemente para pasar al otro lado, al barrio Chaco’i.
Los fines de semana aumenta la afluencia de personas que quieren darse un paseo en lancha, ya sea para escapar de calor sofocante o para apreciar la naturaleza y así cambiar de perspectiva; observando la ciudad desde un ángulo distinto.