En la ocasión, los transportistas llegaron a la conclusión que los problemas más acuciantes de cada año se circunscriben al embotellamiento vehicular, y hablaron de un plan de desvíos de vehículos por los caminos auxiliares habilitados en las fechas topes.
Los propietarios de ómnibus de pasajeros, cuyas unidades de transportes cada año prestan los servicios de traslados a los devotos de la virgen hasta el santuario, coincidieron en apuntar que las autoridades que obligan al desvió de vehículos durante los días topes de dichas festividades, deben tener en cuenta para este año, que los desvíos por caminos alternativos para llegar a la basílica deben ser destinados exclusivamente para los automóviles, camionetas y todo tipo de vehículos livianos.
Exclusivo. Dijeron que el tramo que conduce directo a la basílica, deberían ser utilizados únicamente por los ómnibus que transportan 40 o 50 pasajeros pues llevan mayor cantidad de personas; mientras que los vehículos livianos cuentan con aire acondicionado, son más rápidos y llevan menor cantidad de personas en su interior, y pueden desviar con mayor facilidad.
Consecuentemente, este pedido se hará a las autoridades pertinentes en las próximas reuniones con miras a las festividades del 8 de diciembre, de parte de los propietarios de ómnibus nucleados dentro de la Asociación de Transporte de Central y Cordillera (Acecor).