El proyecto fue diseñado por el Grupo Impulsor de Paridad Democrática, integrado por varios sectores políticos y sociales. Busca que todos los cargos electivos y administrativos sean para 50% varones y 50% mujeres.
La iniciativa generó discrepancia en algunos legisladores, como el diputado Óscar Tuma, quien sostuvo que “el proyecto va totalmente en contra del sistema electoral. Los cargos deben ganarse con votos y no con imposiciones”.
Por su parte, la diputada Olga Ferreira y la senadora Lilian Samaniego defendieron el proyecto de ley. Ferreira sostuvo que la discriminación se crea en los mismos partidos y se establecen porcentajes que van para abajo. Dijo que es preciso contar con la ley de este tipo porque “si no se da la alternancia de varones y mujeres en las listas vamos a seguir con baja participación”.
La senadora Lilian Samaniego señaló que la propuesta no va en contra del desbloqueo. “Al haber más mujeres en los lugares de tomas de decisión va a mejorar nuestra sociedad. Vamos a acompañar el proyecto. Vamos a hablar con los parlamentarios porque es una ley necesaria”, dijo.
En la creación del proyecto de Ley trabajó de forma participativa la Red de Mujeres del Sur con otras organizaciones de mujeres del país, durante todo el año.
“Se apunta a las alianzas por encima de los partidos políticos porque Paraguay tiene una deuda con la democracia y la participación de las mujeres, por eso trasciende el interés partidario para enfocarse en una alianza interpartidaria y social de mujeres para poder llevar adelante este proyecto de ley”, dijo Alice Stumps, representante de la organización Kuña Roga a ÚLTIMAHORA.COM.
En cuanto al proyecto de paridad democrática, explicó que el trabajo les permitió identificar cuáles son las necesidades más sentidas por las mujeres y las más urgentes, como el acceso a la salud, la educación y lo que tiene que ver con la participación en condiciones de igualdad.