Con el inicio de un nuevo periodo, los agentes culturales depositan sus esperanzas en que el sector cuente con políticas públicas para que pueda ser eficientemente explotado.
En ese sentido, el Gobierno del electo presidente Mario Abdo Benítez propone la cultura como factor de desarrollo. Su agenda cuenta con cuatro ejes estratégicos de acción para llevar a cabo tal premisa.
Como eje primordial, buscará fortalecer la identidad cultural; como segundo punto, propone conservar, valorar y promover el patrimonio cultural.
El tercer eje comprende garantizar derechos culturales y la diversidad de los mismos, y como último punto, continuará con el proceso de medición de impacto de la economía naranja en el Producto Interno Bruto (PIB).
De acuerdo con datos incluidos en el programa gubernamental, en Paraguay las actividades creativas y culturales emplean al 3,3% de la población y aportan el 4,1% al PIB, un valor levemente por debajo del aporte de la ganadería, el 5,2%, según un informe del Banco Interamericano de Desarrollo.
Para el cumplimiento de cada objetivo, el plan gubernamental pretende concretar alianzas estratégicas con varias instituciones. Desarrollará planes coordinados con la Secretaría Nacional de Turismo (Senatur), los ministerios de Educación, de Hacienda y de Obras Públicas, el Congreso Nacional, las gobernaciones, municipalidades, entre otros.
De acuerdo con los planes de acción, estos se enfocarán en campañas de concienciación, planes de capacitación, informatización de archivos, protección, conservación y restauración de patrimonios, así como otro tipo de labores.
Otro punto resaltante es que el próximo Gobierno impulsará la declaración de Patrimonio Mundial ante la Unesco de sitios emblemáticos como la Iglesia de Yaguarón, las Misiones Jesuíticas de San Cosme y Damián, entre otros.
En materia de empleo, en el rubro, el presidente electo quiere incentivar la generación de puestos de trabajo como guías turísticos y el emprendedurismo.
Por años, los Gobiernos que pasaron vienen arrastrando deudas con la cultura, lo que a su vez afecta a todos los paraguayos y la visibilidad internacional que se tiene del país.