La feria se inició el viernes en el Centro de Convenciones del Mariscal, donde participaron más 30 restaurantes y proveedores de Asunción.
Aguirre señaló que ayer cerca del mediodía la gente prácticamente invadió la feria, hecho que les deja la sensación de que hay una curva de crecimiento grande respecto al año pasado. “Sentimos que hay comunicación con los cocineros que entendieron el modelo de feria, como también los comensales. Es decir, aquí uno viene con el apetito versus hambre. Sabemos que la gente es muy abierta a las clases de cocina, a curiosear, a ver qué hay”, enfatizó.
Añadió que también generó interés el prelanzamiento del libro de origen y evolución de la gastronomía paraguaya. Precisó que el lanzamiento oficial de este trabajo está previsto para noviembre.
MOVIDO. Aguirre señaló que tuvieron un buen movimiento de gente durante los tres días de la feria y esperaban cerrar anoche finalmente con una concurrencia total de 15.000 personas, que tenían como meta.
Manifestó que el objetivo es ser una lupa sobre todo lo bueno que está ocurriendo con la gastronomía y crear un espacio y fuente de comunicación con restaurantes y todos los que se dedican a este rubro en el país. “Pasa que cuando no se comunica algo no existe. Este evento es un gran acto de comunicación que vamos a sistematizar cada año”, enfatizó.
Subrayó que hay planes para que el año próximo puedan concretar la realización de la feria Paladar en Asunción y en Encarnación. Apuntó que es una idea, pero esperan concretarla.
QUIEBRES DE STOCK. En cuanto a comercialización, el nombrado organizador de la feria refirió que todos los participantes tuvieron buena venta y el sábado tuvieron entre tres o cuatro quiebres de stock, es decir, vendieron todo lo que tenían.
“Todos estuvieron muy contentos. Hubo buena energía de los comensales. Estamos agradecidos con ellos y la recepción de los restaurantes, la predisposición que tuvieron para exponer sobre nuestra gastronomía”, destacó Aguirre.