Mario Ferreiro ya es intendente de Asunción, pero su juramento estuvo cargado de anecdotas que se resumen a continuación en 12 hechos puntuales:
1.- La llegada frustrada
Aficionado a la bicicleta desde hace un tiempo, el nuevo intendente quería imprimir una impronta diferente al día de su asunción. Más allá del boato de los autos lujosos, Mario Ferreiro iba a llegar a la sede de la Municipalidad de Asunción en bicicleta. Pero la copiosa lluvia que se registra desde el viernes en la capital del país frustró sus planes. El mismo se encargó, en su discurso inaugural, de comprometerse con sus colegas ciclistas a realizar un recorrido por la ciudad en la semana.
2.- Cambio de locación
La lluvia también aguó la intención de los colaboradores de Mario de realizar el acto de asunción en la explanada del municipio. El ex comunicador, conocedor del significado de los actos masivos, quería tener una baño de multitud con los asuncenos, pero no pudo ser. El acto de juramento finalmente se realizó en una improvisada plataforma en el hall del edificio comunal.
3.- El megáfono
Una falla técnica minutos antes del inicio del momento cumbre, el juramento de Mario, imposibilitó que el sistema de audio desplegado en el hall del palacete municipal funcionara correctamente. Para improvisar, la organización utilizó un megáfono y de esa manera Ferreiro pudo pronunciar, en una insólita acústica, el característico “Sí, juro”. Afortunadamente, el problema fue solucionado a la hora de iniciar el discurso inaugural.
4.- La asistencia de un incondicional
A la hora del juramento, el que ofició de asistente para sostener el megáfono no fue cualquier empleado de la Comuna. Fue el flamante vicepresidente de la Junta Municipal de Asunción, Rodrigo ‘Buye’ Buongermini, de Juntos Podemos, afín al nuevo intendente, quien fue un actor de reparto privilegiado en tan solemne instante.
5.- El apoyo de la familia
Como un hombre hogareño y apasionado de sus hijos, Mario tuvo el acompañamiento de sus seres queridos. Allí, en el hall del Palacete, estuvieron su esposa, Male Caballero, sus seis hijos, sus hermanos, entre ellos el senador Adolfo Ferreiro, y otros invitados especiales, entre éstos Camilo Soares.
6.- Una presencia suspicaz
Precisamente, en la ceremonia estuvo presente Camilo Soares, el ex ministro de Emergencia Nacional de la era de Fernando Lugo y uno de los principales dirigentes del P-MAS, alguien a quien atribuyen una enorme influencia en el gobierno comunal que se inauguró este sábado, pese a que no ocupa ningún cargo político ni administrativo dentro del municipio.
7.- Improvisación y desprolijidad
A la frustrada ceremonia en la explanada, empañada por las lluvias, siguió un acto desprolijo y desordenado en el hall, un lugar que se improvisó y que resultó incómodo para muchos. Esto también se extendió a la sesión realizada en el interior de la Junta Municipal, donde el trabajo de la prensa también se vio afectado por ser un recinto pequeño.
8.- Ausencia del Ejecutivo
Pese a la disposición mostrada en las semanas previas, resultó llamativo que ninguna autoridad en representación del Ejecutivo estuviera presente en el acto de asunción de Mario Ferreiro. Ningún ministro, viceministro o presidente de alguna entidad descentralizada se llegó hasta el Palacete. Es probable que haya pesado el hecho de que Ferreiro representa a un sector importante de la oposición al gobierno de Horacio Cartes.
9.- Pulseras a la usanza de conciertos
Llamó la atención que los cronistas y periodistas acreditados para la jura de Ferreiro debían portar una pulsera especial, parecida a las pulseras de precinto de seguridad utilizada en los conciertos y eventos de espectáculos. Así también, los carnets de acceso a la Junta recién se entregaron luego de iniciado el acto y no antes, como sería en todo evento.
10.- Una jura entre bromas y enojo de un edil
El edil del Partido de la Juventud, Tony Apuril, también protagonizó un hecho curioso. Acostumbrado al humor y rememorando sus actuaciones con Ab Ovo casi se le escapa un “Sí, juro”, tal como lo había hecho Fernando Lugo aquel 15 de agosto de 2008. Por otra parte, el concejal colorado Martín Arévalos se retiró de la sesión especial luego de jurar, molesto aparentemente por no haber integrado la mesa directiva de la Junta.
11.- Un clásico de The Beatles
Un apasionado e incondicional de “los 4 de Liverpool”, Mario Ferreiro fue recibido en el Palacete con los sonidos de “Yellow submarine”, uno de los clásicos temas de The Beatles, interpretado por los integrantes de la Orquesta Sinfónica de Asunción (OSCA).
12.- El rosario
Como aquella noche de su victoria electoral, que la celebró con sus adherentes en el Hotel Guaraní, Mario nuevamente llevó un rosario, dando un claro mensaje de su profunda fe católica, y delante del arzobispo de Asunción, monseñor Edmundo Valenzuela, quien había causado cierta polémica en los días previos a las elecciones municipales.