Los afectados se reunieron con el fiscal Emilio Fuster y el comisario de la 2.ª, Vidal Achucarro, para acordar una solución para los asaltos, venta de drogas y polución sonora.
Los asaltos domiciliarios o callejeros que, generalmente, involucran a motociclistas son una constante en el barrio asunceno. Rubén Cuevas manifestó que los vecinos están cansados de los robos y ya no saben a quién recurrir. “Nosotros andamos enjaulados y los ladrones sueltos en las calles”, expresó.
El comisario Achucarro dijo que es importante escuchar las inquietudes de los pobladores para trabajar en forma coordinada. Mencionó que los vecinos ya tienen el número directo de la comisaría y el número del jefe para que las intervenciones se den de inmediato.
Respecto a las falencias que se observan en la comunicación con el 911, argumentó que muchas veces no ingresan las llamadas por la saturación del sistema. Se está analizando con los vecinos colocar una caseta policial en la zona, en tanto que los pobladores pretenden instalar cámaras de circuito cerrado, según reportó Juan Agüero.