19 may. 2024

Cadep suma dudas sobre proyección de crecimiento económico para 2015

El centro de estudios divulgó un análisis sobre proyecciones del PIB. Cuestiona baja participación del sector agropecuario y la alta asignación de los sectores servicios, manufacturas y de la construcción.

Fernando Masi

Fernando Masi

El economista Fernando Masi formula una serie de interrogantes sobre la proyección de crecimiento económico del 4,5% previsto para el año entrante. Cuestiona la escasa participación que se le asigna al sector agropecuario, mientras que el 80% está basado en los sectores servicios, manufacturero y construcción.

“Llama la atención la escasa incidencia que se atribuye al sector primario (agrícola-ganadero) sobre el crecimiento del PIB: apenas el 8%, con una variación de apenas 1,7% siendo la ganadería la que presenta el mayor dinamismo dentro del sector primario. A su vez, se proyecta un crecimiento significativo para el sector industrial o manufacturero (5,2%) y se asume una contribución al crecimiento del PIB del orden del 13%", expresa el economista del Centro de Análisis y Estudios de la Economía Paraguaya (Cadep).

Según estas cifras, agrega el economista, las autoridades económicas del país suponen que en el 2015, marcado por la escasa incidencia agropecuaria en el PIB, el crecimiento de la economía se explicará en un 80% por la contribución de los sectores de servicios, manufacturero y de la construcción. Sin embargo –y teniendo en cuenta la participación de la agroindustria dentro del sector manufacturero–, una estimación de la contribución de la cadena agroalimentaria al crecimiento del PIB para el 2015 sería cercana al 16%, es decir, el doble de la contribución solitaria del sector primario.

Interrogantes. Dos cuestionamientos surgen con relación a las proyecciones oficiales del crecimiento del PIB para el año 2015. El primero es si en la reducida contribución de la cadena agroalimentaria se han tenido en cuenta el estancamiento de los precios internacionales agrícolas (a partir del 2013), por un lado, y por el otro, la situación especial por la que atravesaría la exportación de carne refrigerada ante los problemas de la economía rusa (devaluación y bajo crecimiento).

El segundo cuestionamiento tiene que ver con el sector de servicios y de la construcción como motores del crecimiento del PIB en el año 2015. En el caso del sector servicios, una menor dinámica de los agronegocios debería afectar al comercio, el transporte y las finanzas. En el caso de la construcción, el supuesto que parece manejarse a nivel oficial es que tanto los desembolsos de bonos y préstamos para obras como los proyectos de alianzas público-privadas (APP) provocarían una plena ejecución en el sector de infraestructura. Sin embargo, existen dudas sobre el uso pleno de los bonos por las restricciones interpuestas por la Ley de Responsabilidad Fiscal, como por la capacidad de gestión del sector público. Ello no sería el caso de las APP, pero las obras proyectadas para esta modalidad de inversión solamente podrán arrancar tímidamente a inicios del 2015 (y no todas ellas al mismo tiempo). Los proyectos de inversión que quizás puedan producir algún impacto concreto, corresponden a las obras priorizadas a través de la Ley 5074/13, las cuales serían de ejecución acelerada por su enfoque de “Llave en mano”.

¿Es posible pensar en un crecimiento del PIB en el 2015 con una contribución del sector de agronegocios poco significativa? Es decir, ¿se estará comenzando a apartar la economía paraguaya de la dependencia mencionada, a partir del 2015?

Si la respuesta no es afirmativa, surge otra pregunta: ¿Es posible pensar en un crecimiento del PIB del 4,5% en el 2015, en un escenario con precios internacionales estancados y una reducción importante en la producción y exportación de carne?

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