20 may. 2024

Asesino de estudiante pide salidas transitorias

Uno de los asesinos del estudiante Emilio Aguirre, muerto en el 2004, para robarle su celular, solicitó a la jueza de Ejecución, Ana María Llanes, le conceda las salidas transitorias.

Reconstrucción.  Johan Sebastián Sánchez (izq.) se cubre el rostro durante una diligencia.

Reconstrucción. Johan Sebastián Sánchez (izq.) se cubre el rostro durante una diligencia.

Se trata de Johan Sebastián Sánchez Argüello, quien había sido condenado a 25 años de cárcel en el juicio oral y público que se llevó adelante a raíz del homicidio.

El joven Emilio Aguirre fue muerto el 29 de mayo del 2004, por otros jóvenes que le quisieron robar el aparato celular.

A raíz del hecho, fueron sentenciados a 25 años de encierro Nazar Katrip y el ya citado Johan Sebastián Sánchez. Tiene una condena de 12 años, Eduardo Osvaldo Zalazar.

El caso, en su momento, fue bastante conocido debido a que fue uno de los primeros fallecidos en un asalto para robar un aparato celular, conforme con nuestros archivos.

Durante el juicio oral se probó que tanto Katrip como Sánchez fueron los autores del homicidio del joven. Iban en el vehículo a cargo de Zalazar e interceptaron al joven cuando este caminaba por la avenida Venezuela, donde le hirieron de muerte.

PETICIÓN. El condenado Johan Sebastián Sánchez solicitó a la magistrada Llanes las salidas transitorias, una nueva figura del Código de Ejecución Penal, por el que los condenados salen los fines de semana del reclusorio.

La magistrada citó a Sánchez para el lunes a las 8.00, para que mantenga una entrevista con la trabajadora social del Juzgado.

A las 8.20, la jueza citó al reo, su defensor, la fiscala Liz Cowan y al abogado querellante Darío Caballero Bracho, para la audiencia donde se va a estudiar el pedido de las salidas transitorias.

Igualmente, para las 9.20 citó a Sánchez para que mantenga una entrevista con la sicóloga forense del Juzgado.

También ofició al Organismo Técnico Criminológico y al Consejo Asesor de la Penitenciaría Ko’e Pyahu, para que informe si el condenado cumple o no los reuquisitos de la Ley de Ejecución. En la audiencia ante la magistrada se decidirá si corresponde o no el pedido.

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