La medida de fuerza afectó enormemente al movimiento en la frontera entre Paraguay y Brasil, ya que la mitad de los transportes que se movilizan habitualmente en la zona quedaron varados.
El presidente de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), José Berea, dijo que representantes del gremio que encabeza también fueron a Brasilia para expresar su malestar a los mismos huelguistas.
Esperan que tras esta serie de reuniones, se logren alivianar los efectos de la medida de fuerza, y que se considere el paso de los transportes paraguayos.
De hecho, el fin de semana pasado, se logró el paso de una gran cantidad de camiones, lo que permitió reanimar el comercio en la zona fronteriza entre Ciudad del Este y Foz de Yguazú. Sin embargo, el conflicto también tiene sus efectos en Salto del Guairá y Puerto Indio, resaltó.
La medida de fuerza llevada adelante en la frontera con Brasil por los auditores fiscales redujo la importación y la exportación en un 50% en poco más de un mes que se lleva adelante la huelga. La pérdida es de “millones de dólares”, indicó Berea.
En condiciones normales el volumen de salida de alimentos asciende a unas 75.000 toneladas (maíz, trigo, soja, arroz y cascarilla de soja); sin embargo, con la situación actual, el volumen se redujo a tan solo 45.000 toneladas.
Aproximadamente, por día, unos 250 camiones permanecen varados en la frontera.
Capeco viene manteniendo reuniones con la Cancillería Nacional y la Embajada de Brasil en Paraguay para zanjar el inconveniente. Como respuesta, las autoridades de ambas instituciones se comprometieron a llevar adelante los trámites diplomáticos correspondientes.