En cambio, el actual ministro de Salud, doctor Carlos Morínigo, defiende la eficacia del biológico y alega que solo hubo casos aislados y no brotes (epidemia localizada). La afirmación recibe el apoyo del doctor Luis Roberto Escoto, representante de la OPS/OMS en Paraguay, que garantiza que la dosis es segura y eficaz.
La vacuna contra la varicela se aplica a niños a partir de 15 meses, una sola dosis. Desde el 2013, año de introducción al esquema regular de vacunación, a la fecha, en el país se usa el producto de origen coreano con denominación Varicella Vaccine GCC de Green Cross Corporation.
La dosis es de 0,7 ml. El biológico se basa en la “cepa Oka” del virus de varicela, según el comunicado del MSP. En la web de Green Cross se confirma que la dosis es de virus vivos atenuados.
“La eficacia de la misma es del 95% en niños sanos”, menciona el documento de Lineamientos Técnicos y Operativos para la Vacunación Contra el Virus de la Varicela Zoster del 2013. Los efectos adversos se limitan a tumefacción en la zona aplicada y enrojecimiento.
“¿Cómo nosotros, como país, vamos a estar poniendo una vacuna que no funciona?”, dijo el ministro Morínigo en declaraciones a Radio Monumental. Alega que no conocen ningún estudio que demuestra que las dosis no sirven.
¿SIRVE O NO? El ex ministro de Salud, doctor Antonio Arbo, se remite al estudio de Clinical and Vaccine Immunology del 2014, denominado Vacuna contra la varicela en Corea del Sur, que concluye que la vacuna no es eficaz en el 100%.
El documento afirma que “sugieren fuertemente que la vacunación contra la varicela no ha sido efectiva para prevenir la varicela en Corea del Sur y que necesita una gran mejora”. Añade que “la enfermedad progresiva es supuestamente más leve que la varicela en individuos no vacunados, pero nuestro estudio demostró que la vacunación contra la varicela no parecía aliviar los síntomas clínicos”.
En el 2016, este estudio fue confirmado por el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Corea.
El ex ministro de Salud Antonio Arbo se ratificó en su denuncia en declaraciones a la 1080 AM. “La respuesta sensata es hacer caso a la ciencia y no decir que Arbo está ofendiendo. Las autoridades de Salud deben estar actualizadas lo máximo posible y no matar al mensajero”. ¿Sirve o no?
