Bares que sobrepasan el nivel de sonido establecido en medio de viviendas particulares, instalación de tarimas en media calzada, caos en la circulación vehicular por cierre de calles, aparcamiento frente a garajes y basurales luego de cada desvelada. Esta es la realidad que viven pobladores en varias zonas de Asunción donde, en teoría, el plan regulador establece que se trata de áreas residenciales. Estos hechos se dan en barrios como Las Mercedes, Villa Morra y otros ejes, donde si bien pueden instalarse negocios, no se permiten rubros como discotecas.
“Una de nuestras luchas principales es el tema de la polución sonora generada por locales que deberían ser solo gastronómicos, pero que ponen música a alto volumen y no dejan descansar a los vecinos. Los locales además no tienen suficiente espacio para estacionamiento para el cúmulo de gente que tiene. Entonces se ocupan todas las veredas, donde ya no se puede caminar y a la mañana es un basural”, comentó María Mercedes Rivas, presidenta de la comisión vecinal en zona de Villa Morra.
Mientras Rivas describe el hecho, en el entorno se observan restos de bebidas alcohólicas y hasta vidrios de vasos rotos en plena vereda, sobre la calle Senador Long, casi Teniente Vera.
Un hecho llamativo también es la instalación de tarimas de un bar, en la calzada, lo que resta espacio para estacionar. “Si dan el permiso para utilizar la vereda y hasta la calzada, en zona residencial, entonces nosotros también podemos sacar nuestros muebles y montar una oficina frente a nuestras casas”, ironizó a su turno Lizzie González Crossa, vicepresidenta de la misma comisión.
Comentó además que tras un largo proceso y recurrir a la Fiscalía, lograron el cierre de una discoteca pegada a su casa, sobre senador Long, sin embargo el Municipio habilitó el funcionamiento a otro emprendimiento que también vuelve a exceder con la música a alto volumen. Indicó que esta problemática se da en varios otros casos.
El cierre de la calle también es una constante los fines de semana, lo que genera un caos vehicular y pérdida para los negocios de otros rubros, cuando la clausura de la arteria se realiza ya desde tempranas horas, afirman.
Municipio. El director de la Policía Fiscalizadora de la Municipalidad, Maximiliano Ayala, reconoció que entre las infracciones más frecuentes están los locales con licencia gastronómica que funcionan como discoteca. Acotó que no tenía a mano la cantidad de notificaciones que, asegura, realizan.
La polución sonora también es jurisdicción del Ministerio Público. Al respecto, ante la consulta de si se logra la coordinación entre Fiscalía y Municipio para la intervención, el director de Asesoría Jurídica de la Comuna, Benito Torres, indicó que suelen hacer acompañadas, porque dependemos de ellos (Ministerio Público) para que se solicite el acompañamiento. En el caso de suspensión de actividades, dijo que la normativa establece que la Policía debe mantener el cumplimiento de la medida de urgencia, que en general no se mantiene.