Debido a la mala poda de los árboles por parte de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), varios ejemplares sufren daños irreparables, lo que ocasiona que con cada lluvia y vientos intensos que los árboles caigan en la vía pública y ocasionen accidentes.
Varias especies son mutiladas de forma desproporcional; algunos de los árboles son desmembrados desde la mitad por la falta de profesionalismo de los operadores de la ANDE, lo que ocasiona daños severos al ecosistema, que cada vez se encuentra con menos espacios verdes en los barrios.
Fernando Cubilla, biólogo y docente de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales (Facen) de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), sostuvo que se requiere un mayor control por parte de la ANDE para aquellas personas que realizan estos procedimientos.
El profesional resaltó que el principal error consecutivo es la poda desproporcional.
“Lo que más se observa es, por ejemplo, que cortan la mitad de un árbol y la otra mitad la dejan y siempre van cortando esa misma parte y la otra se va cayendo hacia un lado”, explicó.
Acotó que el principal problema del mal corte que realizan se da en las plantas más antiguas.
“El problema se da, sobre todo, en los árboles más antiguos, que son los que caen con las tormentas porque están desequilibrados”, finalizó el biólogo.
Falta control. Indicó que la mayoría de las personas que realizan este servicio son tercerizadas y no funcionarios en sí de la institución.
“Se debería reforzar, evidentemente, el control de la capacitación de las personas y generalmente son gente tercerizada. Supuestamente, en el área de Medio Ambiente de la ANDE se hacen capacitaciones, pero creo que no realmente. Supuestamente tienen todas las instrucciones de cómo podar, pero no respetan nada y lo hacen lo más rápido posible”, alegó.
Destacó que cuando menos frondosa sean las copas de los árboles, menos probabilidad tienen de caerse. Detalló además que la poda del más del 65% del follaje es lo que ocasiona la caída de los mismos.
“La poda a destiempo, por ejemplo, o podar más del 65% del follaje es lo que conlleva a perder el árbol y la especie muere”, explicó.
En tanto, los vecinos se quejaron por el procedimiento utilizado por la ANDE y piden que mejoren. Cuadras enteras pueden verse con árboles más cortados.
Los árboles que caen con la tormenta son los que quedaron desequilibrados, asegura Cubilla.