El Ejecutivo tiene solo hasta esta semana para expedirse porque el presupuesto debe comenzar a regir desde enero. El Congreso ya dio sanción al proyecto el 3 de diciembre. Está incluido además un aumento salarial para los legisladores de G. 6 millones para cada uno, que no estaba en la propuesta inicial de Peña, aunque igualmente el presidente accedió como una concesión política.
Privilegio. El autoaumento que se asignaron los legisladores es de más de G. 6 millones, con lo que su remuneración mensual supera los G. 38 millones. Desde el inicio, los legisladores presionaban por un aumento en todas sus formas, como cupos de combustible o seguro médico privado, bajo el argumento de que sus gastos por su investidura son muy altos y el salario no les alcanza, sobre todo a los que deben viajar desde el interior del país y además pagar un alquiler en la capital.
Es el costo político para mantener la paz en la relación entre Gobierno y Congreso, además de asegurar el trabajo territorial para las elecciones municipales del 2026, ya que tanto diputados como senadores son los actores con más cercanía con la ciudadanía o sus bases partidarias. El Estado, por tanto, de esta manera financiará sus recorridos en cada punto del país.
El presidente promulgará el aumento, porque es de solo G. 15.000 millones, según indicó.
“Porque el presupuesto es de USD 17.000 millones. Hoy se está hablando de que se quiere un aumento de USD 20 millones para el Poder Judicial. Hay G. 100.000 millones y todos son reclamos justos. Pero empezamos a juntar todo eso y estamos hablando de incrementos que podrían llegar a USD 500 millones”, lanzó.
El cartismo asegura que se trata del mejor presupuesto de la historia porque tiene gran énfasis en sectores sociales como salud y educación.
También prevén un aumento en recaudación.