La propuesta fue presentada por los senadores de Patria Querida, quienes argumentan que los partidos no pueden quedarse sin representación parlamentaria, como ocurrió con Paraguayo Cubas y Jorge Oviedo Matto, quienes habían quedado afuera, uno por expulsión y otro por renuncia.
Con la salida de los legisladores, Cruzada Nacional y Unace se quedaron sin bancas en la Cámara Alta, porque solamente se prevén 30 suplentes para 45 senadores.
En el proyecto se estipula que el porcentaje de proporcionalidad directa obtenida por cada lista se multiplica por 30, para determinar la cantidad de escaños de senadores suplentes a ser asignados.
“En caso de renuncia, inhabilidad, muerte o permiso de un senador ya incorporado, lo sustituirá aquel que en la lista respectiva de suplentes de su partido o movimiento político figure en el orden de prelación”, se establece.
Se menciona que cuando una banca titular es asumida por el suplente del mismo partido o movimiento de forma permanente, la Justicia Electoral debe ampliar la resolución de proclamación de la lista de suplentes.
