Juan José Brull | Ñeembucú
Tras cumplir con las exigencias de la Aduana de Argentina, la balsa restablece el cruce internacional, Pilar (Paraguay) y Puerto Cano (Argentina).
El 31 de agosto, después de más de 8 meses, se pudieron reanudar los viajes entre ambas localidades. Sin embargo, al día siguiente se suspendieron nuevamente. Las autoridades de Argentina exigían que la embarcación cuente con los servicios de un agente marítimo para seguir con sus viajes.
La empresa que maneja la prestación del ferry es la misma que cubre el itinerario Ita Enramada-Clorinda.
El requerimiento se pudo superar y los viajes se restablecen. El transporte es utilizado desde principios de la década del 90 y permitió mejorar la relación fronteriza entre Paraguay y Argentina.
Se trata de un paso fronterizo importante debido a que el cruce internacional es muy utilizado por turistas y compatriotas.
La puesta nuevamente en marcha del servicio era esperada por los pobladores, fundamentalmente, los paraguayos residentes en Buenos Aires y otras provincias argentinas. También se suma el interés de los turistas argentinos que llegan hasta la capital de Ñeembucú para realizar compras.