Por Miguel H. López
Dentro de un marco de luces pirotécnicas que estallaron la noche cuando Guetta comenzaba a ‘pinchar’ discos alrededor de las 02.15 del sábado, unos 15 mil asistentes a la mayor fiesta de música electrónica del año desataron el momento más eufórico de todas las presentaciones. Sus más conocidos temas resonaron en gargantas y cuerpos que soltaron energía y pusieron movimiento frenético en medio del sofocante calor.
La previa estuvo a cargo de importantes referentes de la música electrónica internacional como los argentinos Fernando Delgado, Marcos Paz, Ezequiel Dero; los brasileños Killer on The Dance Floor y al paraguayo Silvio Mattio, con muy buen nivel, le tocó cerrar una larga jornada de ritmo, buenas mezclas y energía, ya cuando amanecía.
Guetta demostró tener el público de su lado. Con una empatía admirable, saludó en inglés y terminó por generar el clima necesario para la euforia. La “artillería” de sonido rompió con todo y empezaron a sentirse temas como when love takes over, que es un éxito de este año y una versión más moderna de the World is mine, uno de sus mayores éxitos de 2007, Love don’t let me go, sexy bitch, Love is gone, I gotta feeling y tomó por asalto al público con un funk brasileño: Rap das armas.
El espectáculo, previsto solo para mayores de 18 años finalmente no fue tal. Por los accesos pasaron adolescentes que iban a escuchar a sus artistas preferidos sin siquiera exhibir documento de identidad. Sin embargo, el celo estuvo en otros niveles como no acreditar al sector de la prensa perteneciente a los canales de televisión para evitar filmaciones.
Los concurrentes, muy expresivos en estos eventos, no repararon en elogios al aludir la presentación de los DJs, así como casi no hubo opinión que no concordara en los defectos de la organización a cargo de New Vision. Malos tratos en las entradas, locaciones pésimas, el sector de generales inundado por barro, malos olores y una distancia extrema del escenario con un sistema de sonido débil que impedía vivir el espectáculo del mismo modo en todas partes. En medio de un calor que rondaba los 30ºC el desabastecimiento de bebidas frías fue el mayor castigo.
Sitios de Internet como Facebook y Orkut se llenaron de comentarios críticos a la manera en que fue manejado el evento de nivel internacional.
Para el año 2010 se prepara la 6ª edición del Red Sound que desde sus inicios en 2005 no dejó de traer artistas de altísimo nivel. El desafío estará en evitar que al final todo lo bueno se vea empañado por la pésima organización.
Foto: Gentileza Web de Ezequiel Dero