El proyecto es liderado por el Ministerio de Obras Públicas y Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Durante este plan piloto, que inicia este año, se intervendrá la mencionada dimensión. El proyecto en general tiene una duración de tres años. En total se plantea la restauración de cerca de 65 hectáreas.
Entre las especies nativas a ser utilizadas, de acuerdo a la disponibilidad del mercado local, se plantean cerca de 30: Urunde’ymi, Aratiku guasu, Amba’y guasu, Lapacho negro, Lapacho rosado, Guajayvi, Peterevy, Pakuri, Inga’i, Kurupa’y kuru, Kurupa’yra, Manduvirá, Tatarê, Yvope, Yvyra ju, Yvyra pytã, Yvyraro, Tarumá, Kamba aka guasu, Tatajyva, Guaviju, Guavira pytã, Yva hai, Ñangapiry, Yvapurû, Yvaporoity, Ñandypa guasu, Palo blanco, Palo piedra, Yvapovo, Aguaí, Jagua pety, Ka’a oveti.
Características. “El 50% del Parque está ocupado por el pasto estrella. Este produce sustancias denominadas alelopáticas que impiden que otras especies crezcan y compitan. Es además 60 veces más rápida que las nativas para producir biomasa. Por eso buscamos reverdecer el área con especies nativas”, indicó el biólogo Víctor Vera, consultor del proyecto.
En el caso de la leucaena también señaló que impide el crecimiento de otras especies en su entorno. No existe fauna, como aves o insectos, ni descomposición de materia orgánica.
El biólogo advirtió que el área tendrá un impacto visual cuando sean tumbadas para luego cultivar vegetación nativa de rápido crecimiento.
“En el incendio del 2019, que por ejemplo afectó a cerca de 20 hectáreas del Parque Guasu, en ese espacio ahora ya no existen especies nativas. Ocuparon las exóticas”.
El proyecto piloto tendrá una inversión de USD 1.500 USD 2.000 por hectárea. Será financiado por el proyecto “Asunción, Ciudad Verde de las Américas”. Vera afirmó que es la primera vez que en el país se trabajará en recuperación natural de esta característica.