Un sistema inmune débil es blanco de diversas enfermedades porque disminuye su capacidad de defendernos.
Pero ¿qué es el sistema inmunitario? Comprende una amplia red de tejidos, órganos y células que se traduce en la “capacidad natural del organismo para defenderse de los organismos patógenos (por ejemplo, virus o bacterias) y resistir a las infecciones”, según la conceptualización de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Entonces para un sistema inmune fuerte, la licenciada en Nutrición, Lis Quevedo, del Instituto de Previsión Social (IPS), ofreció ocho consejos para el fortalecimiento con la finalidad de evitar enfermedades y llevar una vida sana.
“Lo ideal es siempre que los trescientos sesenta y cinco días del año se lleve una correcta alimentación. Además de la alimentación, incluye también poder realizar actividad física; que no sea un paciente sedentario, que no consuma en exceso alcohol, evitar el tabaquismo, también debe cuidar el estrés, porque ahora el estrés le enferma a todos, y también incluye la correcta higiene diaria”.
A estos consejos variados –explicó la nutricionista Quevedo– se incluye el consumo de vitaminas y minerales que son importantes para tener un sistema inmune fuerte.
“Entre ellos, se encuentran la vitamina A, vitamina C, B, Zinc. Es importante consumir en todo momento. Tratar de consumir todos los días estos alimentos con una alimentación balanceada y variada”, recomendó. También recomendó consumir alimentos con vitamina E, B6 y B12.
Por otra parte, no se debe dejar de lado la importancia de la vitamina D. “Vivimos en Paraguay y no tenemos acceso al mar y casi toda la cantidad de vitaminas tenemos de animales que son grasos. Pero también podemos obtener el aguacate y también las yemas de huevo. Y algunas carnes, carnes rojas que son criadas a pasto. Ahora, por ejemplo, en Paraguay tenemos ya algunas ganaderas que tienen sus animales criados a pasto, entonces estos sí van a tener vitamina D”.
Rayos que alimentan. Para complementar el consumo de vitamina D es sumamente importante la exposición solar.
“Porque la vitamina D se activa cuando nos ponemos al sol y hay tener en cuenta que por lo menos media hora de exposición solar en horas permitidas porque vivimos en un país extremadamente caliente, entonces en horas permitidas por lo menos media hora de exposición solar”.
Pero no solo la alimentación adecuada es un factor clave, sino que también aprender a gestionar el estrés.
“El estrés afecta muchísimo al sistema inmune. El estrés también hace que baje nuestro sistema inmune, entonces no solamente una época del año, no solamente en julio que hace frío o no solamente en enero que entramos y salimos del aire”. (Ver infografía).
En caso necesario y tras la consulta con un especialista, se puede optar por suplementos de vitaminas.
“Por ejemplo, en cuanto a la vitamina D, si no consumimos la suficiente cantidad de alimentos que tiene vitamina D, entonces; por ejemplo, recurrir a la suplementación siempre y cuando tengamos un dosaje de la vitamina D, que eso un médico nos solicita para hacer el dosaje, y el médico te indica si es superbajo tu vitamina D”.
A las recomendaciones se debe incluir actividad física, desde ejercicios, caminatas, zumba, yoga, etc. Por sobre todo, la persona debe optar por algo que le guste y pueda mantener en el tiempo.
“En cuanto al alcohol y el tabaquismo lo ideal es disminuir, o evitar, si sos paciente tabaquista, necesitas mayor cantidad de vitamina C. El alcohol no es recomendable, pero de igual manera las personas consumen alcohol y debe ser con moderación”.