La fiscala Reinalda Palacios explicó que realizaron la intervención a la empresa FrigoNorte de Pedro Juan Caballero, Departamento de Amambay, tras el reporte de una supuesta fuga de amoníaco y la afectación de nueve empleados que presentaron algunos síntomas como mareos.
“Hicimos la intervención debido a que se estaba haciendo viral de que varias personas estaban internadas en IPS a consecuencia de intoxicación por amoníaco. Se intervino el lugar con los bomberos y ellos, con su equipo adecuado y autorización de los directivos, logramos ingresar al lugar donde estaban los trabajadores”, puntualizó.
Según los bomberos que ingresaron, no se encuentran vestigios del producto y el medidor daba cero, siguió mencionando la agente fiscal.
Respecto a lo que se pudo haber inhalado, manifestó que se esperará el reporte de los médicos que realizaron análisis a los trabajadores.
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“Ellos (la empresa) niegan que hubo fuga y los bomberos no encontraron vestigios”, explicó.
Por otro lado, mencionó que otro equipo de fiscales fue hasta IPS, donde fueron trasladados los afectados, para verificar la situación y tomar los datos, pero no se pudo hablar con ninguno.
“El médico no pudo determinar el motivo. Unos cuantos ya tuvieron el alta. Por el momento, se tiene que esperar el informe médico”, manifestó.
El bombero Paul Maidana indicó que se usó un equipo que detecta amoníaco y “dio cero el marcador”, informó el corresponsal de Última Hora, Marciano Candia.
Más temprano, en el comunicado que emitió la empresa señalaron que todo se trató de un simulacro interno de evacuación en las áreas frías de la planta “con el objetivo de verificar la eficacia de los protocolos de respuesta ante emergencias y detectar posibles fallas en los procedimientos establecidos”.
Igualmente, indicaron que el ejercicio fue realizado de “forma sorpresiva y controlada”, exclusivamente en las áreas frías y que son el cuarteo, despostada y sectores adyacentes.
Indicaron que algunos de sus colaboradores presentaron episodios de desmayos “atribuidos al susto o reacción emocional generada por el ejercicio sorpresivo, sin que existiera exposición a ningún agente químico ni riesgo físico real”.