Según los registros del Ministerio de Economía y Finanzas, en junio de este año, la funcionaria cobró un total de G. 171.540.450, de los cuales, G. 56.283.606 era en concepto de sueldo, y en concepto de gastos de traslado G. 115.256.844.
La resolución del MRE señala que acepta la renuncia presentada por Cardozo y que dio por terminadas sus funciones desde el 1 de agosto de este año, por lo que pasa a situación de retiro del Servicio Diplomático y Consular de la República del Paraguay.
Antes de haber ejercido el cargo de cónsul de Paraguay en Córdoba, la misma cumplió funciones en la embajada de Paraguay en Tokyo, Japón.
La denuncia. En setiembre del 2020, el Sindicato de Funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores reclamó por medio de una nota al entonces canciller Antonio Rivas Palacios que no se haya tomado ninguna medida administrativa respecto al caso de la funcionaria por seguir cobrando rubros de alquiler y diferencia de costos de vida cuando ya estaba en Paraguay.
La denuncia señala que cobró G. 657.128.752, sin trabajar, desde noviembre de 2019 a julio de 2020, tiempo en que se desarrolló la pandemia de Covid-19 en el mundo, y el Gobierno llamó a políticas de austeridad.
La funcionaria negó esta acusación y calificó la información de estar tergiversada, ser tendenciosa, sin sustento legal, según una nota remitida a ÚH por su abogada Patricia Cabrera Rojas.
En el escrito, la abogada dice que la funcionaria dio término anticipado al contrato de alquiler en Japón, “economizando a favor de la Cancillería el concepto de alquiler a partir del mes de noviembre (2019)”, aclara.
Cuenta que, el 31 de octubre de 2019, partió de Japón dejando sus pertenencias en un depósito a la espera de retorno. Cardozo recibió el permiso, con goce de sueldo, del canciller Antonio Rivas Palacios, por 90 días, por razones de salud, según la resolución.
Los registros dicen que cobró lo mismo mientras estuvo de permiso, en sueldo, más de G. 450 millones de noviembre del 2019 a julio del 2020.