Stefano Pavetti, encargado del proyecto de adquisición del órgano, informó que el órgano proviene de la ciudad de Broni, Provincia de Pavía, Italia.
Las piezas fueron descendidas de un camión este jueves y serán armadas en 20 días por técnicos italianos. El instrumento fue construido por el italiano Lorenzo Pedrazzi, constructor de órganos, y será ubicado en el lugar del coro de la Catedral.
Pavetti comentó que la Arquidiócesis está pagando por el instrumento a cuotas, pero que es un sueño hecho realidad ya que en Paraguay solo se cuenta con un órgano de tubos, que está en la iglesia de la Encarnación. No obstante, el nuevo será tres veces más grande que este.
El imponente órgano pesa tres toneladas, tiene 1.600 tubos, dos motores, cuatro fuelles, una consola con dos teclados y 28 registros.
El propósito de esta adquisición es elevar el nivel de la música sacra en Paraguay y mejorar la educación musical. “Dará posibilidad a los jóvenes paraguayos de alta formación académica musical de ejercer en el país sin tener que migrar al exterior en busca de mejores oportunidades”, comunicó el Arzobispado.
Por su parte, el director de la Schola Cantorum y del Coro Papal, Enrique Alfonso, había dicho en su momento que “el gran instrumento es indispensable para cumplir con la alta responsabilidad de la música, la cual ejerce una verdadera función ministerial en el servicio de la liturgia, cuya finalidad es la glorificación de Dios y acompañamiento en la evangelización”, como en las grandes catedrales del mundo.
Con la llegada del órgano de tubos se prevé la realización de grandes conciertos, según anunciaron.